Jesús Torquemada
Análisisis
Francia es ya un país tripartidista
Jesús Torquemada
En las departamentales francesas, está claro quién ha ganado y quién ha perdido. Ha perdido el Partido Socialista, que está entrando en un camino muy peligroso
Pocas veces unas elecciones tienen un resultado tan indiscutible. En las departamentales francesas, está claro quién ha ganado y quién ha perdido. Ha perdido el Partido Socialista, que está entrando en un camino muy peligroso. Le puede pasar lo mismo que al PASOK griego, que en solo cinco años pasó de estar en el poder a casi quedarse fuera del Parlamento.
Y es que en las últimas cuatro elecciones celebradas en Francia, el Partido Socialista ha caído una vez tras otra, y todavía no ve el fondo. Ha ganado, evidentemente, la derecha tradicional, la agrupada en torno al expresidente Sarkozy, que ve reforzada su ambición de presentarse a las presidenciales de 2017.
Va a gobernar en más de dos tercios de los departamentos franceses; pero para las presidenciales aún queda mucho, que no cante victoria tan pronto. Y también gana el Frente Nacional, aunque no le sirve de mucho. El Frente Nacional no gobernará en ningún departamento, pero ha quedado en segunda posición en muchos, ha conseguido cien consejeros y ha vuelto a superar el 20 % de los votos, como ya lo hizo en las elecciones europeas. Eso significa que al menos uno de cada cinco franceses piensa que el Frente Nacional es un partido tan legítimo como cualquier otro. Francia es ya un país tripartidista.
