Jesús Torquemada
Análisis
Tsipras pide un rescate que en realidad no quiere
Jesús Torquemada
El líder griego no ha cumplido las condiciones del segundo rescate, no quiere devolver el dinero que debe y ahora pide que le den más dinero sin más.
Cuando Alexis Tsipras llegó al poder, hace medio año, no quería un tercer rescate para Grecia. Curiosamente, eran sus socios europeos los que defendían que, si acababa satisfactoriamente el segundo rescate, habría que ir pensando en un tercero, porque Grecia iba a seguir necesitando asistencia financiera. Un rescate es un préstamo que incluye una serie de condiciones, y el Gobierno griego no quería que se le impusieran condiciones nuevas asociadas a un tercer rescate. Durante estos meses, lo que se ha estado negociando era que Grecia cumpliera las condiciones del segundo rescate; del tercero todavía no se hablaba.
Ahora, visto el resultado de las negociaciones, parece bastante claro que el Gobierno griego nunca ha tenido intención de cumplirlas. Por eso sorprende tanto que ahora Tsipras pida otro rescate, es decir, otro préstamo, y además una reestructuración de la deuda, es decir, un perdón de todo o parte de la deuda griega. No ha cumplido las condiciones del segundo rescate, no quiere devolver el dinero que debe y ahora pide que le den más dinero sin más; por la cara, como se suele decir. Esto parece una estrategia para el referéndum del domingo, en el que Tsipras promueve el no, es decir, que no se acepte la última oferta presentada por los socios, que son a la vez acreedores. Con esta estrategia, Tsipras intenta convencer a los griegos de que ha agotado todas las posibilidades de negociación con la Unión Europea, que los europeos solo quieren humillar al pueblo griego, y que, por tanto, los griegos debe apelar a su orgullo nacional y votar no.
