Anesvad contra la trata de seres humanos

“Mi hermana y yo fuimos vendidas en Tailandia y explotadas durante más de 4 meses”. Lord tenía solo 15 años cuando esto ocurrió. Durante semanas, deambuló de prostíbulo en prostíbulo antes de escapar y ser recogida por sus padres en el puente de la amistad que une Laos con Tailandia.

Embarazada, fue tratada de graves secuelas físicas y mentales en Village Focus International (VFI), la organización que colabora con Anesvad en la lucha contra esta lacra en Laos. Su historia, desgraciadamente, no es única, se repite con demasiada frecuencia.

La trata se da en circunstancias de pobreza y exclusión. Por preservar su intimidad, la foto no se corresponde con Lord. Foto: Anesvad

La más grave violación de los derechos humanos, la trata de personas, no tiene fronteras y afecta a cerca de 21 millones de personas en el mundo, víctimas de trata y de trabajo forzoso. Es un negocio ilegal, el tercero más lucrativo del mundo, y clandestino, que afecta a prácticamente todos los países, ya sea de origen, tránsito o destino de las víctimas.

La trata de seres humanos implica reclutamiento, transporte, traslado, acogida o recepción de una persona a través del uso de la fuerza, el engaño u otros medios con el fin de explotarla.

La Organización Internacional del Trabajo (OIT) cifra en 4,5 millones las víctimas de explotación sexual forzosa en todo el mundo -el 90% son mujeres y niñas-; se cree en realidad que son muchas más, pero es difícil cuantificar su dimensión.

Las cifras asustan y son reveladoras de las situaciones que padecen millones de personas en el mundo: Con tan solo 100 euros, en Tailandia se puede comprar una esclava sexual. En España hay 45.000 víctimas de la trata con fines de explotación sexual.

Ésta es precisamente una de las modalidades de trata más extendida y común en todo el mundo. Su impacto se prolonga tras el cautiverio y deja graves secuelas físicas y mentales en las víctimas, en su mayoría mujeres, niñas y niños.

El promedio de tiempo que estas personas pasan en situación de esclavitud es de 18 meses, antes de escapar o ser rescatadas. La trata es una forma moderna de esclavitud y cada vez que se comete este delito se violan todos los derechos de la persona, corrompiendo no solo su libertad y dignidad, sino también su integridad física y emocional.

La trata convierte a la persona en mercancía y eso tiene graves consecuencias en la salud. Según el primer estudio en Asia sobre las consecuencias y riesgos de la Trata de Seres Humanos en la salud, realizado por Anesvad junto con la Organización Internacional para las Migraciones (OIM) y la London School of Hygiene &Tropical Medicine (LSHTM), una de cada dos víctimas de trata (48%) ha sufrido violencia física y/o sexual -patadas, encierros, vejaciones, amenazas, etc.- y presenta trastornos por ansiedad (42,8%), depresión (61,2%) y estrés post-traumático (38,9%).

El estudio fue elaborado a través de un millar de encuestas realizadas a supervivientes de la trata que, tras ser liberados/as, han sido atendidos/as en centros pos-trata de Camboya, Tailandia y Vietnam. Con este trabajo, titulado La salud y la trata de personas en la Subregión del Gran Mekong, Anesvad busca llamar la atención de la comunidad internacional sobre la urgencia de poner en marcha sistemas de salud, especialmente mental, para las víctimas de trata en esta región del mundo.

¿Qué puedes hacer?

Anesvad cumple 20 años en la lucha contra la trata de seres humanos: 1995-2015. En sus intervenciones, combina la promoción de la salud física y mental de las víctimas, con la reinserción social y la generación de ingresos, mediante la formación y el empleo.

Una de esas intervenciones se lleva a cabo en Laos, de la mano de la organización local VFI y en cuyo centro se recuperan actualmente 60 víctimas de esta lacra. Allí trabajamos por la reinserción y reintegración de las supervivientes. Les prestamos asistencia sanitaria para que se recuperen de las secuelas físicas. Además, les proporcionamos formación para que puedan tener un trabajo e ingresos y ser de nuevo libres.

VFI, a la que Anesvad apoya, lleva a cabo proyectos de lucha contra la trata de seres humanos desde el año 2006 con un programa liderado por mujeres y que cuenta con el respaldo y reconocimiento del Gobierno de Laos y de la sociedad civil.

Colaborar con Anesvad es sencillo, pero fundamental. Con tu FIRMA estás sumándote al trabajo de esta ONG y estás reivindicando que nadie tiene precio y que todas las personas tenemos derecho a ser libres.

Además, el movimiento #ToleranciaCeroConLaTrata tiene un símbolo que representa la lucha contra la trata, y que identifica a todas las personas luchadoras contra la causa. Se trata de un simple ANILLO. Un anillo que cualquiera de estas niñas y mujeres podría llevar en sus dedos si lograsen, de nuevo, ser personas libres. Además de eso, puedes hacer un donativo para que pueda seguir desarrollando sus proyectos

-Con 36 € pueden hacer una revisión médica a dos supervivientes de la trata.

-Con 60 € pueden ayudar a supervivientes de la trata a que aprendan a gestionar un negocio.

-Con 120 € pueden formar a supervivientes de la trata en un empleo

Con el movimiento #ToleranciaCeroConLaTrata el objetivo es llegar a más personas, concienciar a toda la sociedad sobre un problema global que se encuentra no solo más allá de nuestras fronteras, sino también cerca.

En Anesvad, trabajan por el derecho a la salud y como ONG activa luchan sin descanso contra la trata de personas. En la web  www.toleranciaceroconlatrata.org, encontrarás toda la información de esta campaña que busca sumar en la lucha contra la Trata de Seres Humanos para que todas las personas puedan ser libres. Porque nadie tiene precio.