Cerrar

Jesús Torquemada

Análisis

Peligroso ambiente de odio en Estados Unidos

Jesús Torquemada

Jesús Torquemada

Hay muchos llamamientos al odio y al enfrentamiento, especialmente en las redes sociales. Si a eso se le añade el fácil acceso a las armas, el cóctel es de alto riesgo.

James Hodgkinson, el que disparó ayer en Estados Unidos contra un grupo de diputados republicanos, básicamente era un idiota. Se le ha descrito como un simpatizante de Bernie Sanders, el candidato socialdemócrata que despertó grandes ilusiones en la campaña electoral del año pasado, y es cierto que trabajó como voluntario para la campaña de Sanders. Por eso, su acción ha sido explicada como un acto de odio hacia Donald Trump y el Partido Republicano en general.

Pero es evidente que no entendió nada de lo que significaba realmente Sanders, que ayer condenó rápidamente este acto de violencia. Así que Hodgkinson era un idiota, como, dicho sea de paso, todos los que matan civiles. Ya, pero era un idiota con acceso fácil a un fusil de guerra. Ese es un problema muy grande que tiene Estados Unidos y que es incapaz de solucionar. Cualquiera puede conseguir un arma, y así tienen las cifras de homicidios que tienen. Obama intentó restringir algo la venta de armas, pero Trump es partidario de mantener su venta libre.

Y la acción de Hodgkinson indica algo más: se ha instalado en la sociedad estadounidense una peligrosa división política en la que hay muchos llamamientos al odio y al enfrentamiento, especialmente en las redes sociales. Si a eso se le añade el fácil acceso a las armas, el cóctel es de alto riesgo.