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Jesús Torquemada

Análisis

Macron llega a Córcega muy firme

Jesús Torquemada

Jesús Torquemada

El presidente francés se negó ayer a acercar y amnistiar a los presos corsos, y lo hizo a su llegada a la isla en el vigésimo aniversario del asesinato de Claude Érignac.

El presidente francés, Emmanuel Macron, ha llegado a Córcega con un discurso duro que indica que no está dispuesto a hacer concesiones. Los nacionalistas corsos ganaron las elecciones regionales de diciembre con una amplia mayoría y reclaman a París más autonomía, la cooficialidad de la lengua corsa y el acercamiento, y después la amnistía, de los presos que efectuaron atentados en la isla.

Sobre este asunto de los presos, Macron fue ayer muy claro: "No habrá olvido ni amnistía". En un gesto muy simbólico, su llegada a Córcega fue exactamente cuando se cumplía el vigésimo aniversario del asesinato de Claude Érignac, que entonces era el prefecto de la isla. El autor del atentado, Yvan Colonna, está en la cárcel condenado a cadena perpetua. Y resulta que el actual presidente del Consejo Regional de Córcega, el nacionalista Gilles Simeoni, fue el abogado defensor de Colonna.

Macron se reúne hoy con Simeoni y con el otro líder nacionalista, Jean-Guy Talamoni, que también fue abogado de presos y que ahora preside la Asamblea Legislativa corsa. Quizá ayer Macron hizo un discurso para su público y hoy, en la mesa, se mostrará más flexible, pero no lo parece.