El tiroteo de Múnich desata el debate sobre el control de armas

Tras el tiroteo de Múnich del viernes en el que Ali David Sonboly, un joven alemán-iraní de 18 años, mató a 9 personas e hirió a otras 35 personas, en Alemania se ha desatado el debate sobre el control de armas.

Una de las preguntas que deberá esclarecer la investigación es cómo Ali David Sonboly, con problemas psíquicos y sin antecedentes penales, consiguió la pistola con la que llevó a cabo la matanza. La policía parte de la base de que el joven obtuvo el arma de manera ilegal puesto que no tenía licencia y, además, el número de serie de la pistola había sido limado lo que apunta a que la compró en el mercado negro.

En declaraciones que publica hoy el dominical Bild am Sonntag, el ministro de Interior Thomas de Maiziére, ha reiterado que una vez aclarado el camino de la pistola antes de llegar a manos de Ali David Sonboly, "tenemos que examinar si es necesario hacer reformas legales para mejor el control de armas".

También el ministro de Economía y vicecanciller, Sigmar Gabriel, ha opinado, en declaraciones a los diarios del grupo Funke, que "tenemos que seguir haciendo todo lo que esté a nuestro alcance para limitar el acceso a armas".