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Cine

El cine español, de luto

Alfredo Landa y el 'landismo': Biografía de un actor con género propio

Redacción

Protagonista de películas como 'El bosque animado' (1987) y 'Los santos inocentes' (1984), el actor ha fallecido este jueves, a los 80 años de edad.

  • Biografía de Alfredo Landa, actor navarro que da nombre al 'landismo'.

    Biografía de Alfredo Landa, actor navarro que da nombre al 'landismo'

Alfredo Landa, estandarte del 'landismo' y protagonista de películas como El bosque animado (1987) y Los santos inocentes (1984), ha fallecido este jueves en Madrid a los 80 años, según informa la Academia de Cine. Alfredo Landa era uno de los pocos actores que podía presumir de tener un género propio.

Alfredo Landa nació en Pamplona (Navarra) el 3 de marzo de 1933, pero fue en Donostia-San Sebastián donde cursó bachillerato. "En San Sebastián hice una función en el teatro, y cuando salí en el primer mutis y me aplaudieron, vi un destello, un relámpago que me inundó, y una voz me dijo: Tú tienes que ser cómico. Se me quedó tan grabado que he sido cómico porque no habría sabido ser otra cosa", explicaba el actor.

En Donostia fundó con varios amigos el Teatro Universitario, y se curtió en el humor de Mihura, Jardiel Poncela y Capote, entre otros.

En 1958, con 25 años, abandonó la carrera de Derecho, pese a la oposición de su familia, y se trasladó a Madrid para convertirse en actor con "sólo 7.000 pesetas y una carta de recomendación en el bolsillo". Allí debutó en las tablas con Nacida ayer.

Gracias a su experiencia como intérprete en el teatro universitario, consiguió sobrevivir a base de pequeños papeles en las salas de la capital española. Reconocía que, al principio, su carrera se fraguó con trabajos alimenticios, "para salir adelante, porque para luego triunfar, primero hace falta trabajar, la experiencia es vital'', decía el actor.

Fue en una de esas salas, el Teatro María Guerrero, donde captó la atención del director José María Forqué. De esta forma, se estrenó en el cine por la puerta grande con Atraco a las tres, de José María Forqué, junto a intérpretes ya consagrados como José Luis López Vázquez y Gracita Morales. Este papel, que le abrió las puertas del cine, fue el preludio de una carrera con más de 120 películas y marcada por su propio género, el 'landismo'.

El 'landismo'

Este subgénero de la comedia, que nació en torno a la figura del actor y que fue mal recibido por la crítica, se prolongó a lo largo de los años setenta coincidiendo con los últimos coletazos del franquismo y la explosión del turismo internacional en España.

Con el paso del tiempo, y bajo la dirección de cineastas como Pedro Lazaga y Fernando Merino, el 'landismo' se convirtió en fiel reflejo de su época a través de personajes reprimidos que encarnaban las frustraciones nacionales y generacionales de los españoles.

A pesar de su mala prensa, el actor nunca renegó del 'landismo' y siempre se sintió orgulloso de prestar su apellido al subgénero.

De esta etapa destacan cintas como Cateto a babor, No desearás al vecino del quinto (Ramón Fernández, 1970) o Vente a Alemania, Pepe (Pedro Lazaga, 1971), donde compartió protagonismo con otros referentes del 'landismo' como Florinda Chico o José Sacristán.

Giro dramático

Tras casi 15 años dedicado a la comedia, un género que nunca abandonaría totalmente, Alfredo Landa demostró su capacidad para interpretar papeles dramáticos en la cinta El Puente (Juan Antonio Bardem, 1976), que supuso un punto de inflexión en su trayectoria.

A partir de entonces, gozó del apoyo de la crítica y comenzó a recibir ofertas para cintas dramáticas, entre las que destaca Los santos inocentes (Mario Camus, 1984), que le valió el premio al mejor actor en el Festival de Cannes junto a Paco Rabal.

Landa trabajó en siete películas de José Luis Garci, entre ellas Las verdes praderas (1979), El crack 1 y 2 (1981 y 1983), Canción de cuna (1994), Historia de un beso (2002), Tiovivo C. 1950 (2004) y Luz de domingo (2007), su trabajo de despedida.

Premios

A lo largo de su carrera, recibió varios galardones nacionales, entre los que se encuentran dos premios Goya al mejor actor por El bosque animado y La marrana (1992), ambas de José Luis Cuerda; el Príncipe de Viana de la Cultura (2008) y cuatro menciones al mejor actor (1980, 1982, 1995 y 2008) del Círculo de Escritores Cinematográficos (CEC). También recibió el Premio de la Asociación de Actores (Aisge) del Festival de San Sebastián (2003); el Premio La Casa del Actor a su trayectoria (2006); o la Biznaga de Oro a su carrera (2007), del Festival de Cine Español de Málaga, donde anunció su despedida profesional. Ese mismo año, el actor recibió el Goya de Honor 2007 en reconocimiento a toda su carrera. Fue Tambor de Oro en 1985.

Enfermedad

A principios de 2004, le diagnosticaron un cáncer de colon y fue intervenido una semana después. Vivía retirado del cine y de la vida pública desde 2008 y en 2009 sufrió un ictus que le postró en una silla de ruedas.