Zinemaldia 2024
Crítica
Poteo con Michael Fassbender
Arkaitz Villar
Sin complicaciones, 'Americano' y 'Le Havre' dejan buen sabor de boca en la parte final del festival.
Ayer tuvimos el momento fan del certamen. Nada más salir de la proyección de ‘Americano’, mientras tomábamos un vino junto a la plaza de la Trinidad, avistamos a Michael Fassbender en un bar cercano. Ya en ese establecimiento y mientras hacíamos que bebíamos unas copas de vino esperando que Fassbender hiciera su aparición conocimos a un portugués que tenía más peligro que Mourinho y Pepe juntos. '¿Tienen ustedes un cargador de blackberry?', no he oído una forma más original para que el ave de rapiña ataque a su presa. El tio era un 'bon vivant' que venía de holidays y business a Donosti, vamos, un vividor.
Nada más marcharse el tipo este, Michael Fassbender hizo aparición para la alegría del sector femenino. Que majo, que guapo, que agradable, que si a mí me ha dicho que tal, que si a mi esto otro, etc. Un auténtico momentazo. Mientras, apuraba la copa con un compañero mientras hacíamos para nuestro interior los típicos comentarios masculinos en este tipo de ocasiones: que si no es tan guapo, que si no es tan alto, tampoco es tan buen actor, seguro que la tiene más pequeña, y tal.
En lo cinematográfico el finlandés Aki Kaurismaki ha presentado 'Le Havre', una cinta fiel a su estilo que convence y deja un buen sabor de boca. Sin caer en los experimentos fallidos de otros directores, narra la historia de Marcel Marx, un bohemio que ayudará a un joven sin papeles a escapar de la policía mientras espera la recuperación de su mujer enferma. Una historia cotidiana y optimista donde no faltan ni los toques de humor ni los personajes habituales de Kaurismaki.
Antes de entrar a la sala no quería saber nada sobre la película de Mathieu Demy, hijo de Jacques Demy a quien el festival realiza una retrospectiva este año. 'Americano' es un viaje, una especie de road movie donde su protagonista Martín, encarnado por el propio Mathieu intentará buscar respuestas a la fallida relación que tenía con su madre recién fallecida. Salma Hayek, Géraldine Chaplin, Chiara Mastroianni, y Carlos Bardem participan en una película que cuenta con una estupenda banda sonora y tiene una gran estética. Pero las vueltas que da el guión acaban quitándole el peso que podría tener.