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El Bidasoa Irun pierde en Polonia y se complica el pase a los octavos de final

Agencias | Redacción

El equipo guipuzcoano ha perdido por 32-25 ante el Orlen Wisla Plock el partido de ida de la eliminatoria de los dieciseisavos de final de la Liga de Campeones.

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Wisla Plock - Bidasoa Irun. Foto: EiTB

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El Bidasoa-Irun ha salido derrotado del Orlen Arena ante el Wisla Plock (32-25), en un partido de ida donde los de Jacobo Cuétara fallaron en las dos áreas lo que deja muy favorable a los polacos la eliminatoria previa a los octavos de final que se resolverá el próximo sábado en Artaleku.

El equipo irunés ha cometido muchos errores no forzados en ataque y las ofensivas de los polacos gracias al juego interior han hecho que los irundarras hayan visto como el rival se ha ido en el marcador. Los de Cuétara no han sabido cortar las transiciones rápidas del Wisla Plock. Pasado el minuto 20 es donde el partido se ha escapado para los irundarras. Del 10-8 al 14-9 para el Wisla Plock ha propiciado el tiempo puerto y el enfado de Cuétara. Ha sido la clave de la ida. No le ha salido nada bien al Bidasoa-Irun en el primer tiempo. Inofensivos en ataque, sin apenas aciertos de Ledo y Rangel bajo palos y dos de dos en penaltis fallados. Además, los de Cuétara no han sabido aprovechar la superioridad en la cancha debido a las cinco exclusiones del Wisla Plock en la primera media hora de juego (17-11).

En la segunda mitad, el Bidasoa-Irun ha cortado la sangría defensiva y se ha mostrado más sólido en esa faceta del juego. A pesar de ello, el Wisla Plock ha sabido aprovechar los errores que ha continuado realizando el equipo amarillo. Los de Cuétara se han llegado a acercar a cinco tantos del Wisla Plock en tres ocasiones, pero los locales han apretado y han vuelto a poner más tierra de por medio. Con la mirada en el partido de vuelta, el Bidasoa-Irun ha buscado la menor diferencia posible, pero con el 32-25 final, los siete tantos de desventaja hacen difícil la remontada en Artaleku.

Ficha técnica:

32 – Orlen Wisla Plock (17+15): Stevanovic (p), Daszek (9, 3p), Stenmalm (1), Susija, Mihic (2), Sulic (6), Mlakar (2) –siete inicial–, Morawski (ps), Zdrahala, Matulic, Ruiz Sánchez (1), Szita (6), Zabic, Igropulo (1, 1p), Czaplinski y Mindegia (4).

25 – Bidasoa-Irun (11+14): Ledo (p), Crowley (1), Odriozola (3), E. Salinas (5), Renaud-David (2), R. Salinas (2), Azkue (7) –siete inicial–, Rangel (ps), Cavero, Serrano, De la Salud (1), Santano, Tesoriere, Da Silva, Bartók (4) y Seri.

Marcador cada cinco minutos: 3-2, 6-4, 7-6, 11-8, 16-9, 17-11 (descanso); 20-14, 23-17, 25-18, 27-21, 30-24 y 32-25 (final).

Árbitros: Bonaventura y Bonaventura (Francia). Excluyeron a los locales Daszek, Susja y Zabic y a los visitantes R. Salinas y Odriozola. El local Stenmalm fue expulsado por recibir tres exclusiones.