televisión
En Semana Santa
Euskal Telebista ofrece la pastoral Belagileen trajeria
A.A.
EITB
Los vecinos de Aloze-Ziboze-Onizegaine representan la obra escrita por Ttittika Rekalt y que trata sobre las brujas que durante el siglo XVII fueron quemadas en Iparralde por la Inquisición.
Como todos los años, Euskal Telebista grabó la pastoral en Zuberoa el pasado verano y la emitirá esta Semana Santa, en versión original y con subtítulos en euskara batua. La pastoral Belagileen trajeria se podrá ver íntegramente en la madrugada de jueves a viernes a las 00:30 horas, mientras que el viernes (07:50), sábado (07:55) y domingo (07:25) habrá oportunidad de verla fragmentada.
La obra Belagileen trajeria (La tragedia de las brujas), representada por 95 vecinos del pueblo de Aloze-Ziboze-Onizegaine, trata sobre las brujas que durante el siglo XVII fueron quemadas en Iparralde por la Inquisición. Esta historia real, de hace 400 años, está escrita por Ttitika Rekalt, Jean Pierra Rekalt es su regidor e Ihitz Iriart la protagonista. En los cantos están Niko Etxart, Mixel Etxekopar y Oihan Oliarj.
En el año 1609, Henri IV, rey de Francia y de Navarra, envió a Pierre De Lancre a Lapurdi para acabar con los presuntos casos de brujería. La visión machista propia de aquella época e instituciones y, el culturicidio generalizado hacia "lo no francés" se lo pusieron muy fácil a aquel inquisidor, ya que en Lapurdi vivían y trabajaban libremente muchas mujeres (esposas, solteras, hijas, vecinas, amigas, amantes, madres, abuelas, hermanas...) y, además estas eran altamente sospechosas porque no hablaban francés, sino euskera, consecuentemente eran ininteligibles y, por tanto, sin derechos. De Lancre tenía el caso cerrado, las mujeres que no hablaran francés y no fueran amigables con él y con sus súbditos eran, sin duda alguna, brujas. Como consecuencia de esta forma de “legislar”, muchísimas mujeres libres fueron quemadas en la hoguera ante sus vecinos.
Las famosas y queridas pastorales de Zuberoa son obras de teatro en verso representadas por habitantes de un pueblo xiberutarra y que cuentan la historia de un personaje o acontecimiento histórico. Esta tradición está arraigada desde la Edad Media, no obstante, la primera constancia escrita data del año 1634, aquel año la pastoral correspondió al pueblo de Atarratze y sus vecinos representaron la vida de Saint Jacques.