Felipe Etxebarria
Análisis
La UE impondrá nuevas sanciones a Rusia
Felipe Etxebarria
Las nuevas sanciones se sumarán a las que ya se aplicaban a Rusia desde la anexión de Crimea y el este de Ucrania.
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Hace pocas semanas Alemania, Francia e Italia no querían saber nada de nuevas sanciones a Rusia. El pasado enero estos países, conciliadores con Moscú, bloquearon nuevas medidas de retorsión por el caso Navalni que pedían algunos países como Polonia.
Pero este lunes la situación ha dado un giro y los 27 ministros de exteriores de la UE han decidido poner en marcha nuevas sanciones. La próxima semana se propondrán las medidas concretas dentro del nuevo marco adoptado por la UE contra las violaciones de los derechos humanos en el mundo. Estas sanciones se aplicarán a los círculos rusos directamente relacionados con la represión de las protestas y del líder opositor Navalni. Por ello, el aparato de justicia ruso será el más afectado por las medidas.
¿Qué ha ocurrido desde enero para que la UE dé un giro en sus relaciones con Moscú?
1. Alexei Navalni ha sido condenado a dos años y medio de cárcel, pese a que el Tribunal Europeo de Derechos Humanos exigía su liberación.
2. El polémico viaje del alto Representante de la UE Josep Borrell a Moscú, donde fue públicamente humillado por el ministro de exteriores Serguey Lavrov, con quien tuvo además una dura conversación privada.
3. La expulsión de Moscú de tres diplomáticos europeos (un alemán, un sueco y un polaco).
El propio Borrell, fuertemente criticado en la UE por el fallido viaje, ha defendido las sanciones al constatar que Rusia ha escogido la vía de la confrontación.
Las nuevas sanciones se sumarán a las que ya se aplicaban a Rusia desde la anexión de Crimea y el este de Ucrania. Rusia sigue, además, sin cumplir los acuerdos de Minsk.
Moscú ha estado advirtiendo desde hace tiempo a la UE para disuadirla de dar este paso. Ahora, desde el ministerio de exteriores, ruso se amenaza con una rápida y proporcional respuesta.
El proprio ministro Lavrov advertía recientemente que Rusia no admite injerencias en sus asuntos internos y que está preparada para romper incluso sus relaciones con la UE.
