Inbiomed, en una situación 'muy delicada' por la falta de financiación

El instituto de investigación donostiarra Inbiomed necesita 2,1 millones de euros para mantener su actividad, una cantidad que han solicitado tanto a los miembros de su patronato como a los gobiernos central y vasco.

El presidente ejecutivo de Inbiomed, Gurutz Linazasoro, ha comparecido en las Juntas Generales de Gipuzkoa para dar cuenta de la situación en la que se encuentra este instituto que este año ha llevado a cabo un ERE y ha reducido la plantilla en un 40 %, además de reducir los salarios de sus trabajadores en un 11 %.

Linazasoro ha calificado de "muy delicada" la situación económica que atraviesa el centro, sobretodo debido a la disminución de la financiación de la Obra Social de Kutxa, su principal fuente de ingresos con un 60 %.

La Obra Social de Kutxa no mantuvo el compromiso con Inbiomed y, de los 1,4 millones de euros anuales de financiación acordados, sólo ha podido asignar 696.000, lo que para el presidente ejecutivo resulta "insuficiente" para llevar a cabo las gestiones derivadas del ERE.

El instituto se ha visto obligado a recurrir a ayudas especiales emitidas por la Diputación foral que ascienden a 300.000 euros, a los que se suman ahora los 400.000 euros que esta entidad se ha comprometido ha destinar con el reparto del déficit.

Linazasoro ha recordado también que el Ministerio de Hacienda ha reclamado el pago de una deuda de 2006 cifrada en 400.000 euros, aunque espera que el recurso presentado ante el Contencioso Administrativo le de la razón al centro de investigación.

En cuanto al compromiso del Gobierno Vasco a contribuir con la financiación del centro, el representante de los trabajadores de Inbiomed, Jon Fernández, ha afirmado que por ahora "son solo palabras" ya que no saben "ni cuándo ni cuánto" va a aportar la administración vasca y ha anunciado que el próximo 8 de noviembre se producirá una reunión entre ambas partes.