CEBEK acusa a ELA de violencia verbal por su campaña sobre precariedad

El presidente de la Confederación Empresarial de Bizkaia (Cebek), Iñaki Garcinuño, ha acusado a ELA de "violencia verbal", por su campaña contra la precariedad laboral, y ha advertido de que los empresarios no admitirán que se traspase "la línea roja" de la coacción.

Durante su participación en un desayuno informativo organizado por Forum Europa, Garcinuño se ha referido a la campaña impulsada por ELA a través de pasquines que incluyen fotografías de empresarios, para atajar la precariedad y "poner cara" a los "piratas" que se "forran con la miseria laboral".

Para el dirigente de la patronal vizcaína, la campaña de ELA es "una burda mentira", y es "lisa y llanamente, violencia verbal". "No me acostumbraré a eso, ni cuando es un insulto, ni cuando era una diana", ha dicho. Además, ha advertido a la central nacionalista de que Confebask nunca aceptará "que se traspase la línea roja de la coacción, como ha hecho ELA ahora".

Por otra parte, ha defendido el documento para un nuevo modelo de relaciones laborales presentado por Confebask en la mesa de diálogo social, porque "es necesario modernizar las relaciones laborales" y puede ser "una base" para trabajar en ello.

Ante la llamada de ELA a retirar las subvenciones a las organizaciones patronales, ha asegurado que "eso es un mito" porque, "a diferencia de los sindicatos", no reciben subvenciones públicas a fondo perdido. Por ello ha reclamado un tratamiento "más igualitario" en la financiación entre confederaciones empresariales y sindicatos.

Respuesta de ELA

Por su parte, ELA ha respondido a Cebek que ni "coacciona" ni utiliza la "violencia verbal" en la campaña.

Según el sindicato, "lo que ELA ha hecho al anunciar su campaña ha sido unir la denuncia de la miseria laboral y la precariedad que sufren cada vez más personas, con quienes las impulsan y se benefician de ellas".

"Ni unos, los que la sufren; ni otros, los que la imponen, son personas anónimas para nuestro sindicato", ha añadido.

ELA ha considerado que la patronal pretende "desviar el debate" planteado por el sindicato y ha advertido de los "intentos de criminalizar la lucha sindical y social".