Economía -
Trabajadoras del hogar
Trabajadoras del hogar piden la aprobación del subsidio extraordinario
Para las trabajadoras de hogar "el golpe" de la pandemia "fue muy especial porque no contaban con la prestación de desempleo".
Agencias | Redacción
Euskaraz irakurri: Etxeko langileek aparteko dirulaguntzak ebaztea eskatu dute
Una decena de colectivos de trabajadoras del hogar de todo el Estado, entre ellos, cuatro vascos, han exigido "la resolución urgente de todas las solicitudes de subsidio extraordinario" presentadas por empleadas de este sector sin derecho a prestación por desempleo.
En un comunicado, el colectivo, en el que se integran la Asociación ATH-ELE, de Bilbao, SINA Kooperatiba Elkartea Txikia, de Bizkaia, la Asociación Malen Etxea, de Zumaia, y el grupo de Trabajadoras de Hogar de SOS Racismo de Gipuzkoa, han reclamado el abono en julio de todas las solicitudes pendientes "sin excusas y regularización y prestaciones para quienes no estaban de alta en la Seguridad Social".
El colectivo ha recordado que, tres meses después de que la crisis provocada por la pandemia privara de su empleo a millones de personas, quienes vivían al día con bajos salarios, se quedaron sin recursos económicos para subsistir" y, para las trabajadoras de hogar, "el golpe fue muy especial porque no contaban con la prestación de desempleo".
En este contexto, añaden que al Gobierno "le costó mes y medio poner en marcha un subsidio", dirigido "solo para las que estaban de alta en la Seguridad Social". "Pero hoy es el día en que ninguna ha recibido su prestación, porque el SEPE tiene tres meses para reconocerla a partir de la fecha de la solicitud", prosiguen en su escrito.
Asimismo, afirman muchas de ellas, todavía no la han presentado "por falta de información y apoyo para hacerlo y, tampoco, a día de hoy, el Sepe ni siquiera responde a las trabajadoras que consultan sobre el estado de su solicitud".
A juicio del colectivo, que también incluye a asociaciones de Andalucía, Madrid, Galicia, Barcelona y Navarra, estas prácticas representan "la política de siempre con respecto al empleo de hogar y es la vieja normalidad, donde una parte del trabajo no está reconocido: es el que hacen trabajadoras migrantes en situación irregular y trabajadoras sin alta en la Seguridad Social".
Desde su punto de vista "todos los Gobiernos miran para otro lado, porque su trabajo ahorra gasto social y, aquellas cuya existencia se reconoce, las que podrían recibir el subsidio, no son prioridad porque son mujeres haciendo trabajo de mujeres y sus necesidades económicas, su derecho a ser informadas, no cuentan con la atención ni garantías del resto de los sectores".
Por ese motivo, desde el colectivo han advertido de que "no van a normalizar esta situación y no van a esperar calladas", por lo que exigen el cobro en julio de "todas las prestaciones pendientes".