Economía -
En Gasteiz
Los transportistas vascos se concentrarán contra el céntimo sanitario
Se concentrarán este lunes frente a la sede del Gobierno Vasco en Vitoria-Gasteiz. Afirman que el céntimo sanitario supondría un recargo de 4,8 céntimos de euro por litro.
Redacción
La federación de cooperativas de Transporte de Euskadi, la agrupación alavesa de transporte y el sindicato Hiru han asegurado que la aplicación del céntimo sanitario podría suponer gravar el consumo de carburantes con 4,8 céntimos de euro por litro.
A su vez, han anunciado la convocatoria de una concentración para el próximo lunes frente a la sede del Gobierno Vasco en Vitoria-Gasteiz.
El consejero de Sanidad y Consumo del Gobierno Vasco, Rafael Bengoa, propuso a principios de este mes la aplicación del llamado céntimo sanitario, una medida de financiación que supone cargar con un céntimo el litro de combustible.
La representante de Hiru Estitxu Ugarte ha expresado su "rotundo rechazo" a la iniciativa.
En este sentido, ha señalado que la "imposición" del céntimo sanitario supone un "repago" a la Seguridad Social, y ha considerado que tendría una "repercusión negativa muy importante" para los transportistas.
DOS TRAMOS
Ugarte ha manifestado su impresión de que "se está engañando a la sociedad", ya que el incremento, según ha afirmado, no sería de un céntimo por litro. Así, ha explicado que este impuesto tiene dos tramos, el estatal y el autonómico, y ha recordado que ya se cobra desde 2002 en el primero, con un recargo de 2,4 céntimos sobre el litro de combustible consumido.
Según ha precisado, las comunidades son las que deciden si aplican el tramo autonómico, y hay diez que ya cuentan con esta tasa. En todas ellas se ha aplicado el recargo máximo, de 4,8 céntimos por litro, lo que, sumado al impuesto estatal, hace que sean 7,2 los céntimos por litro de carburante que pagan adicionalmente los residentes en dichas autonomías. "Esto es lo que ocurriría en Euskadi si se aplica", ha añadido.
Ugarte ha indicado que este impuesto se está cobrando "en contra de la normativa europea", así como que la Comisión Europea "ha puesto en duda su legalidad".