Internacional -
Análisis
Rojos contra amarillos en Tailandia
Los rojos son los partidarios del anterior primer ministro, Thaksin Shinawatra. Los amarillos son los seguidores del primer ministro actual, Abhisit Vejjajiva.
Jesús Torquemada
Estos días, la gente en Tailandia es roja o es amarilla. O estás con los que llevan camiseta roja o estás con los que llevan camiseta amarilla.
Puede parecer un partido de fútbol, pero en realidad es un nuevo capítulo de la pelea por el poder en Tailandia. Los rojos son los partidarios del anterior primer ministro, Thaksin Shinawatra. Los amarillos son los seguidores del primer ministro actual, Abhisit Vejjajiva.
Thaksin ganó las elecciones hace cuatro años, pero le echaron mediante un golpe de Estado entre acusaciones de corrupción. Corrupto es sin duda, como la mayoría de los políticos y empresarios tailandeses. Thaksin se hizo muy rico (el más rico del país) con el negocio de las telecomunicaciones, pero consiguió caer bien a la gente pobre y especialmente a los campesinos, que le apoyaron en las elecciones que ganó.
Frente a Thaksin se alzó la clase media y las elites de Bangkok, que cuentan con el respaldo del rey Bumiphol. Así que el conflicto político que hay en Tailandia es, en cierta forma, una lucha de clases.
Los últimos cuatro años han sido de una gran inestabilidad. Los camisas amarillas salieron a la calle para echar a Thaksin y ahora los camisas rojas salen a la calle para pedir su vuelta. Thaksin vive exiliado entre Dubai y Londres y se hizo muy popular entre sus seguidores cuando compró el equipo de fútbol inglés Manchester City.
En general, las manifestaciones han sido pacíficas, pero ha habido también algunos episodios violentos y acciones espectaculares, como la ocupación del aeropuerto de Bangkok por los amarillos hace un año y medio. Los rojos quieren hacer ahora una acción aún más espectacular: rociar con sangre humana las paredes de las oficinas gubernamentales.