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Asia
75.000 uzbecos huyen de Kirguizistán debido a la violencia étnica
Más de un centenar de personas han muerto y un millar han resultado heridas en los enfrentamientos. El Gobierno kirguís ha autorizado a las fuerzas de seguridad a tirar a matar.
Redacción
El número de muertos en los enfrentamientos entre kirguises y uzbecos, en el sur de Kirguizistán, ha superado ya el centenar, mientras que alrededor de 1.100 personas están heridas. La mayoría de las muertes se han producido en la región de Osh.
Más de 75.000 uzbecos han huído de Kirguizistán a Uzbekistán debido a los brotes de violencia. Uzbekistán ha abierto las fronteras para acoger a los refugiados.
El comandante de la región de Osh, Baktibek Alimbékov, ha declarado que la situación en la zona está bajo control, pero habitantes de la ciudad han informado de que los enfrentamientos han reanudado.
Alrededor de 2.000 personas se han reunido en el hipódromo local para exigir la dimisión del gobernador de Jalal-Abad, Bektur Asánov, así como la detención y comparecencia ante los tribunales del líder uzbeko local, Kadirzhán Batírov, al que acusan de incitar al odio interétnico.
La presidenta interina de Kirguizistán, Rosa Otunbáyeva, solicitó la víspera a Rusia el envío de fuerzas de paz para poner fin a la violencia étnica. Además, Otunbáyeva anunció la apertura unilateral de su frontera con Uzbekistán para el paso de ancianos, mujeres y niños, al vecino país.
La portavoz del presidente ruso, Tatiana Timakova, en cambio, señaló ayer que el conflicto en Kirguizistán es un asunto interno y "Rusia aún no ve condiciones para participar en su arreglo".
El Gobierno kirguiz autorizó el sábado a las fuerzas de seguridad a tirar a matar ante los violentos disturios.