Internacional -
Incendios en Rusia
El humo y el calor obligan a desalojar varias embajadas en Moscú
Rusia está siendo asolada por 101 fuegos de gran envergadura que abarcan 165.000 hectáreas. Hasta el momento, el número de víctimas mortales asciende a 52.
Redacción
Varias embajadas han empezado a retirar a su personal de Moscú debido a la elevada contaminación del aire por los incendios forestales, que según fuentes médicas ha agravado las enfermedades cardiovasculares y disparado los casos letales.
Las misiones diplomáticas de Alemania, Austria, Polonia y Canadá han iniciado la evacuación de parte de personal y de sus familiares desde Moscú, que este sábado ha vuelto a amanecer cubierta por una densa manta de humo.
Israel ha recomendado a su embajada que retire de Moscú al personal que no sea imprescindible, mientras EEUU y varios países europeos han advertido a sus ciudadanos sobre el riesgo de viajar a Rusia debido al impacto de los incendios en la seguridad, la calidad del aire y el transporte.
Según ha informado el Departamento de Sanidad de Moscú, "el nivel de contaminación es muy alto", pues la concentración de sustancias nocivas en la atmósfera supera en más de seis veces los niveles máximos.
Sanidad mantiene su recomendación a los moscovitas de no salir a la calle, no abrir las ventanas y utilizar mascarillas y máscaras de oxígeno, aunque unas y otras ya se han agotado en las farmacias.
El ministerio de Situaciones de Emergencias ha advertido de que la posible llegada de incendios forestales a las regiones fronterizas con Ucrania podría volver a esparcir en el aire restos de radiactividad procedente de la catástrofe nuclear de Chernóbil, de 1986.
Fuentes médicas han declarado que desde el comienzo de la ola de calor en junio, con temperaturas de casi 40 grados, en la capital se registra un brusco incremento de los casos mortales por el doble impacto de las altas temperaturas y el humo en personas enfermas.
290 nuevos incendios en 24 horas
El parte ministerial no precisó el último número de víctimas mortales de los incendios, que la víspera había aumentado hasta las 52 personas y que -en contra de la tendencia mundial- no son bomberos, sino habitantes de pueblos atrapados por el fuego, que no fueron evacuados ni pudieron hacerlo por su cuenta.
En las últimas veinticuatro horas se declararon 290 nuevos incendios y 244 fueron sofocados, mientras la superficie de bosques en llamas ascendió hasta los 193.516 hectáreas, 14.000 más que el viernes.
El ministerio de Emergencia indicó que del total de fuegos activos, 101 son de gran envergadura y abarcan una superficie de más de 165.000 hectáreas.