Cancelan un concierto en Holanda por una amenaza detectada en España

Las autoridades holandesas han cancelado un concierto previsto para este miércoles en una sala de Rotérdam después de que la Policía española alertase de una "amenaza terrorista", según el alcalde, Ahmed Aboutaleb, que ha confirmado el hallazgo de una furgoneta con matrículas de España y bombonas de gas en su interior. No obstante, las primeras investigaciones parecen descatar que se trate de una acción terrorista.

La sala Maassilo, donde iba a tener lugar el concierto del grupo estadounidense Allah-las, ha anunciado en su Twitter la suspensión de la actuación y ha confirmado que la orden se debió a una "amenaza terrorista". El lugar fue evacuado poco después de las 19:00, apenas una hora y media antes del inicio del espectáculo.

La Policía de Países Bajos ha informado en un comunicado de que ordenó la evacuación previo contacto con la organización del evento y después de considerar creíble el aviso remitido.

Suficientemente serio

Aboutaleb ha explicado en una comparecencia ante los medios que el chivatazo procedió de las fuerzas de seguridad de España y era lo suficientemente serio como para tomar riesgos. Según este aviso, se podía producir un atentado durante el concierto.

Las fuerzas de seguridad han localizado en la zona un vehículo con matrículas españolas que tenía varias bombonas de gas en su interior y han detenido a su conductor, de nacionalidad española. La Policía de Rotérdam ha señalado en un tuit que ha sido trasladado a dependencias policiales para ser interrogado.

Fuentes policiales citadas por la cadena holandesa NOS han asegurado que hasta el lugar se ha desplazado un equipo de las fuerzas especiales, así como un gran número de agentes con chalecos antibalas. Las imágenes difundidas por los medios muestran la zona acordonada.

Las fuerzas de seguridad españolas creen que no era una acción terrorista

Según han asegurado a Efe fuentes de la lucha antiterrorista, a falta de nuevos datos y de una confirmación definitiva, se descarta una acción terrorista.

Al parecer, el conductor de la furgoneta, de nacionalidad española pero aún no identificado aunque está detenido, estaba borracho y las bombonas eran de uso doméstico.