Internacional -
Análisis
Chávez gana, pero pierde
El presidente venezolano no tendrá problemas para seguir gobernando, pero sí va a tener problemas para hacerlo a su manera, es decir, haciendo todo lo que le da la gana.
Jesús Torquemada
Es curioso cómo a veces una victoria electoral puede parecer una derrota. Es lo que está pasando en Venezuela. El Partido Socialista Unido de Venezuela, el partido de Chávez, ha sacado 95 escaños en una Asamblea de 165; es decir, 12 más que la mayoría absoluta.
Cuántos gobiernos quisieran disponer de una mayoría así. Y como la mayoría de las leyes se aprueban por mayoría absoluta, mitad más uno de los escaños, Chávez no va a tener problemas para seguir gobernando. Pero sí va a tener problemas para seguir gobernando a su manera, es decir, haciendo todo lo que le da la gana.
La oposición, reunida en la Mesa de la Unidad Democrática, ha conseguido una minoría de bloqueo suficiente para impedir que sean aprobados los nombramientos de altos cargos y también las leyes orgánicas, o sea, las más importantes, que requieren una mayoría de dos tercios para sacarlas adelante.
Durante los últimos cinco años, el presidente ha hecho y deshecho a su antojo, precisamente porque la oposición cometió el error de no presentarse a las anteriores elecciones legislativas. Pero ahora se acabó la "apisonadora Chávez". Por eso Chávez no está tan fanfarrón como de costumbre y sus seguidores están más tristes que alegres.
Hay un par de datos que deberían preocupar a Chávez: uno, que no ha conseguido su objetivo de lograr los dos tercios de los escaños a pesar de que ha manipulado las circunscripciones electorales, otorgando más escaños a las regiones chavistas y menos a las antichavistas; y dos, que aunque los chavistas han conseguido más escaños, la oposición ha sumado más votos, un 52% del total. Malos indicios para Chávez con vistas a las elecciones presidenciales de 2012.