El partido de Berlusconi pierde en Milán y Nápoles

El candidato del centroizquierda Giuliano Pisapia se perfila como el ganador de la alcaldía de Milán en la segunda vuelta de las elecciones municipales celebradas en Italia.

Los primeros datos difundidos señalan que Pisapia contaría con el 53,5% de los votos frente al 46,5% que lograría la alcaldesa saliente, Letizia Moratti, candidata del Pueblo de la Libertad (PDL) del primer ministro Silvio Berlusconi.

También en Nápoles, la otra gran ciudad que necesitó una segunda vuelta para elegir a su alcalde, el candidato de centroizquierda Luigi De Magistris, de Italia de los Valores (IDV), se habría impuesto al candidato de centroderecha Gianni Lettieri con un 54,5% frente a un 45,5%.

La victoria de Pisapia supone el final de 20 años de un gobierno municipal conservador en Milán, además de un duro revés para Berlusconi, quien planteó estas elecciones como un plebiscito para su Gobierno y se volcó en la campaña electoral de la primera vuelta al presentarse como cabeza de lista en la capital lombarda, como le permite el peculiar sistema electoral italiano.

Ante la posibilidad de perder la alcaldía de la capital económica del país, Berlusconi llegó incluso a plantear el traslado de dos ministerios a Milán la pasada semana tras el revés de la primera vuelta y para apaciguar los ánimos de sus socios de la Liga Norte (LN).

Primera vuelta

Pisapia ya se había colocado por delante en la primera vuelta celebrada hace dos semanas, cuando obtuvo el 48,04% de los sufragios, frente al 41,58% de Moratti, aunque en aquella ocasión no logró alcanzar el mínimo necesario para obtener la alcaldía de forma directa.

En Nápoles, la primera vuelta ya dejó fuera de la carrera al candidato del Partido Demócrata (PD), Mario Morcone, representante de un centroizquierda que gobernó la ciudad los últimos 15 años y al que pasaron factura los numerosos escándalos de corrupción internos y su mala gestión de las crisis de las basuras que han azotado la ciudad.