Internacional -
Doble atentado en Noruega
Anders Breivik abandona el Tribunal tras media hora de comparecencia
El autor confeso de los atentados de Noruega ha llegado al Tribunal en un vehículo policial con los cristales tintados. Breivik podría ser condenado a 21 años de cárcel, como máximo.
Redacción
Anders Breivik, el autor confeso del atentado de Oslo y la matanza de Utoya, ha llegado al Tribunal noruego en un vehículo policial con cristales tintados y ha sido introducido por una puerta trasera de las dependencias judiciales. Mientras, su abogado, el afamado Geir Lippestad, ha llegado por separado y por la entrada principal.
Grupos de ciudadanos concentrados ante el juzgado han increpado al abogado, con gritos de "Cómo puedes defender a ese asesino" y "Dile a tu cliente que se queme en el infierno".
La comparecencia ha estado rodeada de grandes medidas de seguridad, mientras un poderoso contingente policial rastreaba la zona con perros entrenados en detección de explosivos. Estaba previsto que Breivik se declarase "no culpable" ante el juez, pese a que ha admitido ante la policía la autoría en solitario del doble ataque, en una sesión que ha sido a puerta cerrada por expresa petición de las fuerzas de seguridad noruegas.
Breivik, de 32 años, ha admitido ante la Policía que llevó a cabo ambos ataques, pero ha denegado cualquier responsabilidad criminal por los mismos. Al parecer, el sospechoso querría contar con una plataforma pública para explicar sus acciones.
El juez ha decidido que la vista sea a puerta cerrada por lo que ha denegado la entrada a los medios de comunicación. Según el código penal noruego, la pena máxima que podría recibir Breivik es de 21 años de cárcel, ya que en el país nórdico las condenas no son acumulativas.
El abogado defensor, Geir Lippestad, ha señalado que Breivik "ha sido políticamente activo y se dio cuenta de que no lograba avances con las herramientas tradicionales de la política, por lo que recurrió a la violencia".
"Espero un informe médico sobre su persona", ha señalado Lippestad. "Se explica claramente y de manera calmada, pero expresa emociones", ha agregado. Breivik afirmó, según su abogado, que los crímenes fueron "atroces pero necesarios". Asimismo, ha indicado que no cree merecer ningún castigo por ellos.
Su objetivo era la ex primer ministro de Noruega
Asimismo, según el diario noruego "Aftenposten", el objetivo de Breivik era asesinar a la ex primer ministro Gro Harlem Brundtland, que dio un discurso en la isla el mismo día del ataque y que abandonó el lugar poco antes de que Breivik llegara.
Brundtland encabezó tres legislaturas laboristas en los años 80 y 90 y es conocida como ''La madre de la nación''. "Breivik tenía planeado ir a Utoya durante la visita de Brundtland, pero ha declarado que llegó con retraso", ha señalado el diario, que cita a fuentes anónimas. El diario señala que Breivik quería "golpear a Gro".
Breivik quiso causar la mayor matanza
Según información recogida por el portal digital noruego "VG", Breivik quiso causar el mayor número de víctimas ya que utilizó balas expansivas, un tipo de munición prohibida en las guerras y que causa terribles heridas internas a las víctimas.
"Esas balas más o menos explotaban dentro del cuerpo de las víctimas. Las heridas internas que tenían eran absolutamente terribles", ha explicado el cirujano jefe del hospital Ringerike, Colin Poole, que ha tratado a 16 heridos en el tiroteo de la isla de Utoya.