Internacional -
Apoyo a la opción europea
Los liberales ganan las elecciones en Holanda
El partido WD del actual primer ministro holandés es la primera fuerza con 41 y escaños, y los laboristas se quedan con 39 asientos.
Redacción
En las elecciones anticipadas de Holanda, celebradas ayer, no se cumplieron las expectativas perfiladas por los sondeos y la opción europea proseguida por los liberales y los laboristas ha sido la gran triunfadora.
El partido liberal del primer ministro holandés, Mark Rutte (WD), se ha confirmado como la primera fuerza del Parlamento holandés, con un total de 41 escaños, diez más que en 2010. Los laboristas son la segunda fuerza del parlamento holandés, formado por 150 diputados, con 39 asientos, con un aumento de nueve escaños, respecto a los comicios anteriores. Los socialistas radicales del SP y el Partido de la Libertad (PVV) del xenófobo Geert Wilders empatan con 15 escaños como tercera fuerza política.
Tras conocerse los resultados del escrutinio, el líder liberal Mark Rutte celebró el éxito de su formación y resaltó su intención de “formar un Gobierno estable”. Además, el Rutte afirmó que los resultados suponen “un impulso para seguir con nuestra política en materia de seguridad, de inmigración, y de seguir con el curso político de los dos últimos años.” El líder laborista, Diederik Samsom, confirmó que está dispuesto a formar un gobierno estable "siempre y cuando los resultados electorales tengan su traducción en un programa de gobierno" y puntualizando que "la política de derecha de los últimos años no seguirá".
El gran derrotado de la noche fue Geert Wilders (PVV), que perdió nueve escaños, se queda con 15, respecto a los 24 logrados en 2010. Wilders reconoció su derrota nada más empezar el recuento de los votos y con lágrimas en los ojos asumió que su discurso de ataque a Europa y al euro “no ha calado en esta ocasión”.
Los líderes Rutte y Samson coinciden en puntos como la solidaridad con Europa del Sur, pero difieren en sus enfoques de ataque a la crisis del euro. El actual primer ministro, Mark Rutte, es partidario de seguir alineado con Finlandia y Alemania, para mantener el déficit por debajo del 3% marcado por el Pacto de Estabilidad. Mientras tanto, el laborista Samson se acerca más a la postura de Francia de hacer reformas estructurales y apoyar la creación de empleo.
El proceso de formación de Gobierno, que se presume largo, se hará por primera vez, y a petición del Parlamento, en ausencia de la reina Beatriz como moderadora.