Quiroga se ofrece al lehendakari para mediar ante Rajoy

La presidenta del PP vasco, Arantza Quiroga, ha ofrecido al lehendakari, Iñigo Urkullu, su "capacidad de influencia" ante el Gobierno de Mariano Rajoy para sacar adelante en Euskadi proyectos económicos "estratégicos" encaminados a superar la crisis.

Quiroga ha abierto hoy en Vitoria-Gasteiz con el lehendakari la ronda de reuniones que va a celebrar con los principales líderes políticos vascos después de su reciente nombramiento como presidenta del PP de Euskadi, aunque no tiene previsto entrevistarse con la portavoz de EH Bildu, Laura Mintegi, porque cree que aún le queda "recorrido para ser un partido plenamente democrático".

Al término del encuentro, que se ha prolongado durante hora y media y se ha centrado en la economía, la dirigente de los populares vascos ha explicado que la salida de la crisis debe ser el "objetivo principal" del Gobierno y ha desvelado que se ha "comprometido" ante Urkullu a "hacer las gestiones oportunas" ante el Gobierno central en cuestiones económicas "estratégicas" que competen al Estado.

Fuentes del Gobierno Vasco han detallado a Efe que entre esos asuntos figuran la construcción del trazado ferroviario de alta velocidad, conocido como "Y" vasca, el reparto de la flexibilización del objetivo del déficit y la renovación de la Ley del Cupo.

"El PP vasco quiere encauzar su capacidad de influencia en salir de la crisis", ha dicho Quiroga y ha añadido: "Nos vamos involucrar. Sabe el lehendakari que va a tener el PP remando en la dirección de sacar a Euskadi de estas situación de crisis".

Quiroga ha asegurado que ha tenido una "gran sintonía" con el lehendakari en el análisis de la situación económica, que le ha pedido acuerdos que no sean "puntuales" ni obedezcan a "las urgencias parlamentarias" de un PNV en minoría (en alusión a un posible pacto con el PSE) y le ha prometido el compromiso del PP si opta por entendimientos que "vayan más allá".

Durante la reunión Quiroga también ha planteado al lehendakari otras cuestiones como la necesidad de "minimizar" la desafección ciudadana hacia la política, de prestigiar las instituciones y de "convivir en libertad".

Sobre este último asunto, ha considerado que tras el cese de la violencia de ETA las instituciones deben trabajar para deslegitimar la violencia y asentar los "principios democráticos irrenunciables" porque no se puede bajar el "listón democrático", ha avisado. Además, le ha dicho al lehendakari que el "foco" no debe ponerse en los presos de ETA, sino en cómo garantizar la convivencia