El alcalde de Donostia rechaza el ataque al monolito de Jaúregui

El alcalde de Donostia-San Sebastián, Juan Karlos Izagirre (Bildu), ha rechazado hoy el ataque perpetrado contra el monolito en recuerdo del exgobernador civil de Gipuzkoa asesinado por ETA, Juan María Jaúregui, al tiempo que ha asegurado que "todas las víctimas merecen reconocimiento y reparación". Al igual que hizo el pasado martes la Diputación de Gipuzkoa -gobernada por Bildu- después de que el PSE/EE le reclamara un pronunciamiento contra este sabotaje, Izagirre ha expresado hoy su rechazo a "todo tipo de acción violenta independientemente del origen de la misma". El primer edil donostiarra ha hecho estas declaraciones durante una rueda de prensa en la que también ha denunciado la desaparición de dos placas en memoria de los represaliados del franquismo ubicadas en el monte Ulía y en la zona de Sagüés, en Donostia-San Sebastián, y en la que ha anunciado su próxima reposición y la celebración de un homenaje en recuerdo de las víctimas de la dictadura, aunque sin concretar su fecha.

Preguntado en este contexto por el reciente ataque al monolito de Jaúregui, Izagirre ha dicho que "la reconciliación será un paso fundamental para superar todas y cada una de las consecuencias del conflicto y del uso de cualquier tipo de violencia". Respecto a las placas en memoria de los represaliados por el franquismo, el alcalde donostiarra ha calificado su desaparición de "inaceptable", al tiempo que ha insistido en la necesidad de reprobar "los ataques a la memoria a cualquier tipo de víctima" y más aún en lo referente a estas víctimas, que son testigos de una historia popular colectiva, silenciada y dejada de lado durante décadas", ha remarcado. El atentado contra el monolito de Juan María Jaúregui es el cuarto que sufre esta estela discoidal que llevaba grabada la frase: "Los que te quisimos te recordaremos", erigida hace ocho años en recuerdo del político socialista asesinado por ETA en 2000. El monumento se encuentra en un paraje del monte Burnikurutzeta, en la confluencia de los municipios guipuzcoanos de Legorreta, Beizama y Tolosa, donde fueron aventadas las cenizas de Jaúregui y donde cada año tiene lugar una ofrenda floral en su memoria.