Sociedad -
Aniversario del incendio
Un año después del incendio, Bermeo sigue sin recuperarse por completo
El gobierno central no ha declarado Bermeo zona catastrófica, lo que reduce el apoyo económico. Los vecinos han confesado sentirse "en la santa ruina" material y psicológica.
Redacción
Hoy se cumple un año del peor incendio en Bizkaia en los últimos 30 años, el ocurrido en el Casco Viejo de la localidad costera de Bermeo.
Un incendio de gran magnitud desatado en un inmueble obligó a desalojar a decenas de vecinos y provocó graves daños en edificios. De hecho, tres de ellos se derrumbaron en poco tiempo y otros cinco resultaron gravemente dañados.
La vida cambia repentinamente
Las cerca de 70 familias afectadas por ese incendio viven hoy situaciones muy diferentes. Algunos están viendo ya terminar los trabajos de reparación de sus viviendas, otros empiezan ahora la reconstrucción, y algunos se han quedado sin casa definitivamente, porque sus comunidades han decidido no volver a levantar el edificio.
Sólo uno de los números, el 16, no volverá a edificarse. El resto tendrá que poner de su bolsillo para tener una nueva casa, porque las indemnizaciones no llegan.
El peor incendio en Bizkaia en los últimos 30 años ha cambiado la vida de muchas familias, pero también ha hecho aflorar la solidaridad y ha reforzado la relación entre vecinos, según Arantza Pérez Basterretxea, presidenta de la asociación de afectados Bermeo suten.
Vecinos de Bermeo, en la "ruina" material y moral
Vecinos de Bermeo han confesado sentirse, un año después, "en la santa ruina" material y psicológica tras verse obligados a pagar hipotecas de viviendas que ya no existen y que tampoco serán reconstruidas.
Es el caso de Gorka Gómez, de 36 años, cuya comunidad de propietarios ha decidido no levantar de nuevo su edificio, uno de los doce que se vio afectados por el incendio, considerado el más importante ocurrido en Bizkaia en las últimas tres décadas.
"Con el dinero que me ha dado el seguro he pagado parte de la hipoteca, pero aún me queda un buen cacho para pagar... Si yo ahora voy al banco para comprarme otra casa y pido una hipoteca nueva, ¿me la van a pagar?", se ha preguntado este joven, que ahora habita en uno de los pisos de alquiler de la Diputación foral.
Pese a que su casa no será reconstruida, Gómez se ha visto obligado a abonar 14.000 euros para el desmontaje del edificio y otros trabajos previos al inicio de la obra.
Con la pérdida de su casa, este joven de Bermeo ha tenido también que despedirse de parte de la historia de su familia, ya que su vivienda perteneció a su abuelo y luego a su padre.
Otro de los vecinos que perdió su casa, Asier Suárez, de 50 años, se angustia también ante la dificultad de comenzar de nuevo "de la noche a la mañana y sin tener culpa de nada".
"Ya tenemos una edad en la que, si tienes que pedir un crédito hipotecario, es bastante difícil que te lo den. Por eso, pedimos al Gobierno Vasco que nos apoye y nos facilite al acceso a créditos blandos o a otro tipo de préstamos", ha explicado a Efe.
Este vecino de Bermeo ha relatado que el dinero cobrado del seguro, no le permitirá abonar los gastos de reconstrucción de su casa, que calcula que podrían superar los 100.000 euros.
Por su parte, el Gobierno español no ha declarado Bermeo zona catastrófica, lo que reduce el apoyo económico, y la alcaldesa ha pedido esta misma semana ayudas excepcionales.