Sociedad -
En Errenteria y Durango
La Ertzaintza investiga dos posibles casos de Ballena Azul en Euskadi
A través de una nota, el Departamento de Seguridad ha explicado que ese reto para adolescentes va influenciando a la víctima en ideas tendentes al suicidio.
Agencias | Redacción
Euskaraz irakurri: Balea Urdina jokoaren ustezko bi kasu ari da ikertzen Ertzaintza
La Ertzaintza está investigando dos posibles casos del 'juego' que incita al suicidio conocido como Ballena Azul. Uno de ellos estaría localizado en Errenteria y el segundo en Durango. En ambos casos las víctimas serían dos menores, de 14 y 17 años, respectivamente.
De confirmarse que las víctimas estaban relacionadas con este reto que se lleva a cabo a través de la redes sociales y promueve de forma directa y explícita la inducción al suicidio, se trataría de casos que se encontrarían en fase preliminar. En el caso de la joven de Durango fueron sus compañeros de clase quienes dieron la voz de alarma cuando percibieron cambios en su comportamiento.
La Ertzaintza avisa de la peligrosidad del reto Ballena Azul
Asimismo, la Ertzaintza ha avisado de la necesidad de actuar para prevenir posibles casos del juego en redes sociales denominado Ballena Azul, que resulta "altamente peligroso" ya que promueve la inducción al suicidio de los adolescentes.
A través de una nota, el departamento de Seguridad ha explicado que ese reto para adolescentes tiene su origen el año pasado en Rusia a través de las redes sociales y consiste en ir superando una serie de retos, numerados del 1 al 50, en los que el administrador va influenciando a la víctima en ideas tendentes al suicidio.
Las pruebas van desde despertarse a horas intempestivas para ver películas de terror, hasta ocasionarse lesiones tales como cortes en brazos y piernas, o permanecer en lugares elevados como puentes o edificios, así como incluye, como última prueba, el suicidio de la víctima.
La persona que controla el reto especifica claramente que una vez iniciado el mismo no se puede abandonar, y que éste tiene que permanecer oculto para terceras personas como educadores o padres.
La Ertzaintza ha explicado que "la peligrosidad del reto consiste fundamentalmente en el perfil de las víctimas" ya que son "adolescentes en pleno proceso de conformación de su personalidad y altamente influenciables".
