Sociedad -
TRAMPAS EN UNA OPOSICIÓN
Pillado un opositor a la Hacienda de Navarra copiando con una sofisticada tecnología
El aspirante era uno de las únicas 11 personas que habían llegado al penúltimo examen, pero su comportamiento en las pruebas anteriores ya había levantado sospechas.
AGENCIAS | REDACCIÓN
Euskaraz irakurri: Nafarroako Ogasunerako hautagai bat kopiatzen harrapatu dute oposizioetan
El pasado martes, 24 de abril, el tribunal de una oposición para acceder al puesto de Técnico de Hacienda del Gobierno de Navarra descubrió, con la colaboración de la Policía Foral, a un aspirante que estaba copiando mediante un sofisticado sistema tecnológico en la cuarta y penúltima prueba de la oposición.
A la convocatoria para cubrir 10 plazas se habían presentado 134 personas, de las que 11 habían aprobado las tres primeras fases. El comportamiento de uno de ellos había levantado las sospechas del tribunal en las anteriores pruebas, por lo que avisaron de ello a Dirección General de Función Pública, que solicitó la colaboración de la Policía Foral.
A la vista de la situación, se organizó un dispositivo especial de cara al cuarto examen para destapar al posible infractor. Dos policías forales se integraron en el tribunal como colaboradores en la vigilancia del aula, mientras otros agentes efectuaban un rastreo por los alrededores del edificio, en prevención de que el opositor pudiera estar siendo ayudado desde fuera por alguien que le transmitía la información.
Los policías presentes en el aula detectaron la existencia de algún dispositivo que estaba recibiendo una señal, que, precisamente, se hacía más fuerte al acercarse al aspirante y se perdía al alejarse de su lado. Además, observaron que el sospechoso efectuaba movimientos extraños manipulando su bolígrafo.
Los agentes interceptaron la señal y la pusieron a disposición del tribunal, que pudo comprobar que el contenido de lo que se escuchaba en la transmisión de audio se correspondía con el objeto del examen que se estaba realizando en ese momento, por lo que la presidenta del tribunal y un policía foral se acercaron al aspirante y le solicitaron que mostrase el dispositivo electrónico que estaba utilizando para copiar, ante lo que reconoció su actuación.
El opositor utilizaba un MP3 con los temas del examen grabados, que llevaba sujeto en el brazo oculto bajo la camisa. Los escuchaba, vía bluetooth, gracias a un pinganillo minúsculo que llevaba introducido de manera profunda en el oído y que era invisible a primera vista. Para seleccionar los temas concretos que habían resultado elegidos en el examen, usaba un bolígrafo, previamente manipulado, que, a modo de selector, le permitía saltar de una pista a otra hasta encontrar el tema deseado.
A la vista de los hechos, el tribunal elaboró una diligencia para hacer constar lo ocurrido, y lógicamente, quedó eliminado de la oposición.