Sociedad -
Caso Marta del Castillo
Los tres presuntos cómplices de Carcaño niegan su participación
El amigo y presunto cómplice del asesino confeso de Marta del Castillo, asegura no saber dónde está el cuerpo. El hermano Carcaño y su novia, tambien han negado haber colaborado en la desaparición.
Redacción
Samuel Benítez, uno de los cuatro acusados por el caso Marta del Castillo, ha asegurado este miércoles que el día 24 de enero de 2009 "nunca pisó" el domicilio de León XIII donde se produjo el crimen y ha negado que el asesino confeso lo llamara esa noche para decirle que "tenía un marrón".
El joven, de 21 años, ha negado que el asesino confeso, Miguel Carcaño, le pidiese ayuda ante "un marrón muy grande" y ha dicho quesu primera información sobre la desaparición de Marta la tuvo de una amiga común que le informó de que la estaban buscando.
En la tercera jornada del juicio que celebra la Audiencia de Sevilla, Benítez, al igual que hizo ayer Carcaño, ha respondido con frialdad y aparente tranquilidad a las preguntas sobre lo ocurrido la noche del 24 de enero de 2009.
Benítez ha dicho que no sabe donde está el cuerpo de la víctima y que indicó un punto donde supuestamente la arrojaron al río porque la Policía le presionó. Ha afirmado que confesó "bajo coacciones, amenazas, agarrones por el cuello y golpes en el pecho".
El hermano de Carcaño niega su participación Francisco Javier Delgado, hermano del asesino confeso de Marta del Castillo, Miguel Carcaño, ha negado haber intervenido en el traslado del cuerpo de la víctima y en su desaparición.
En su declaración ante el tribunal que enjuicia la muerte de Marta, Delgado ha afirmado que no participó en la operación para envolver el cuerpo en una manta o alfombra, que luego sacaron los restantes presuntos cómplices, y ha dicho que cuando llegó al piso de la calle León XIII, hacia las 03:00 de la madrugada, "no olía a limpio y no observó nada raro en la casa o en el salón".
Delgado ha asegurado que hacia las 20:00 horas del 24 de enero de 2009 oyó a su hermano entrar en la vivienda y Miguel le saludó con una sonrisa, de la que interpretó que estaba "con su pareja para tener un momento de relax".
Luego salió y pasó el resto de la noche primero cenando con su exmujer e hija, a continuación estuvo trabajando en su bar hasta las 03:00 de la madrugada, se tomó una copa en otro pub, volvió a su piso y se acostó.
A las 05.00 de la madrugada recibió varias llamadas en el móvil diciéndole que estaban buscando a una chica que había pasado la tarde con su hermano Miguel, ha relatado.
María García, no escuchó nada
La imputada María García, novia del hermano del asesino confeso, Miguel Carcaño, ha reiterado que estuvo estudiando en el piso de la calle León XIII de Sevilla desde la medianoche del 24 de enero de 2009.
También ha dicho que no oyó nada, ni siquiera a los amigos de Marta, que a las 02:15 horas de la madrugada estuvieron llamando a las persianas del piso, ubicado en una planta baja, en busca de la joven.
Ha afirmado "con total rotundidad" que no vio al asesino confeso, Miguel Carcaño, hacia la 01:30 horas empujando una silla de ruedas con el cadáver de Marta ni haber participado con los otros tres acusados en la operación para envolver el cuerpo en una alfombra.
Sobre el olor a limpio que los testigos detectaron en el piso, María, novia del hermano del asesino confeso, ha dicho que en las inmediaciones de la habitación de Carcaño olió algo que le recordaba a las fregonas con las que se limpian los bares.
Con esta declaración ha terminado la última sesión de esta semana y el juicio se reanudará el próximo lunes.