Sociedad -
Bullying
Uno de cada cuatros escolares está en riesgo de sufrir acoso escolar
Según las estimaciones del psicólogo especialista en acoso escolar Iñaki Piñuel, al menos el 44% de los escolares ha padecido alguna situación de maltrato.
Redacción
Uno de cada cuatro escolares de entre 8 y 17 años está en riesgo de padecer secuelas a causa del acoso y la violencia escolar, según ha advertido el psicólogo especialista en moobing y acoso escolar Iñaki Piñuel. El experto considera que detectar y detener el bullying es clave para evitar que la víctima desarrolle trastornos de estrés postraumático infantil que puede arrastrar a su vida de adulto.
Según sus estimaciones, al menos el 44% de los escolares ha padecido alguna situación de maltrato, tal y como queda recogido en el Informe Cisneros X sobre Acoso y Violencia Escolar, en el que el experto ha participado. Este estudio revela, además, que la modalidad más frecuente de acoso escolar es la que se refiere al bloqueo social (marginación, aislamiento), presente en el 30% de los casos. Le siguen el hostigamiento (21%), la manipulación (20%) y la coacción (17%). Exclusión social (16%), intimidación (14%), agresiones (13%) y amenazas (9%) completan la tabla.
Para Piñuel, prevenir, detectar y detener el acoso cuanto antes es fundamental para evitar el desarrollo de secuelas y trastornos de estrés postraumático que pueden prolongarse y cronificarse, llegando hasta la madurez. "No prevenir ni afrontar el problema, por parte de los educadores, padres y profesores, puede provocar que la victimización se convierta en algo crónico, haciendo que esas personas sean más vulnerables en el futuro a otras formas de maltrato", ha señalado.
Por ello, el psicólogo ha recomendado estar atento a la conducta del menor y apoyarle en cuanto sufra algún tipo de acoso. "Los padres deben escuchar al niño, apoyarle en todo y, sobre todo, evitar trivializar o banalizar el problema, enviando mensajes tóxicos del tipo 'no hagas caso, son cosas normales o debes integrarte con tus compañeros'", ha explicado, "estos comentarios consiguen incrementar la indefensión del niño acosado, e internalizar la culpabilidad, paralizándolo", ha afirmado.