Sociedad -
operación tráfico de armas
Detenidas tres personas, dos de ellas en Navarra, por fabricación ilegal de explosivos y tráfico de armas
La investigación ha contado con el apoyo de Interpol. Las dos personas detenidas en la localidad navarra de Pueyo habían adquirido en el extranjero un importante número de armas detonadoras para ser transformadas en armas de fuego reales.
EITB MEDIA
Euskaraz irakurri: Hiru pertsona atxilotu dituzte, bi Nafarroan, lehergailuak legez kanpo egitea eta armakin trafikatzea egotzita
La Guardia Civil ha detenido a dos personas en la localidad navarra de Pueyo y a otra en Sanxenxo (Pontevedra), por los delitos de fabricación ilegal de explosivos y tráfico de armas y municiones, respectivamente.
La investigación comenzó el pasado mes de septiembre, cuando la Guardia Civil tuvo conocimiento a través del Centro de Inteligencia contra el Terrorismo y el Crimen Organizado (CITCO) de que varias personas residentes en las localidades antes citadas habían adquirido y tratado de adquirir sospechosamente sustancias precursoras de explosivos.
Tras varias investigaciones se identificó a un primer comprador que vivía en la provincia de Pontevedra, una persona de 35 años de edad que se dedicaba a fabricar mezclas explosivas de forma casera y a publicar vídeos explicativos sobre cómo realizarlo.
Asimismo, se identificó a un segundo comprador de 40 años de edad que vivía en Navarra, que se había valido de una tercera persona de su entorno para tratar de realizar la compra de los precursores a nombre de ella y de esta forma no ser identificado. Ya en marzo de 2020 había sido detenido en otra operación contra el tráfico de armas.
Con la colaboración de Interpol, se averiguó que este segundo individuo, junto con su pareja, había adquirido en el extranjero un importante número de armas detonadoras, que se sospechaba habrían ido destinadas a ser transformadas en armas de fuego reales.
Una vez detenidos y tras registrar sus domicilios, se intervinieron 2 kg. de precursores y de diversos productos químicos así como utensilios para la fabricación ilegal de explosivos; pistolas listas para su transformación o un centenar de cartuchos detonadores junto a numerosos rodamientos metálicos (a modo de proyectil) para fabricar munición artesanal con proyectil, así como diversas herramientas y maquinaria para la manipulación de armas y fabricación artesanal de munición metálica, entre otras cosas.
Con esta actuación, denominada operación Boxes-Charada, se ha evitado tanto el riesgo de desvío al mercado ilegal de las mezclas de explosivas fabricadas, como que se pudiera producir una explosión accidental durante su elaboración o almacenamiento por los implicados