La mecánica del caracol
Ciencia
Cómo mantener a raya las dislipemias, fuego griego y una estrella de regalo
La dieta y el ejercicio son la clave para tener el colesterol y los triglicéridos en niveles saludables. Un libro recoge armas químicas y biológicas de la antigüedad. Cómo hacer un regalo astronómico.
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Las anchoas mejoran los niveles de colesterol
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Las dislipemias son alteraciones metabólicas muy frecuentes en nuestra sociedad que, como no generan dolor ni problemas evidentes, pasan totalmente desapercibidas. Sin embargo su detección es importante porque constituye un importante factor de riesgo para el desarrollo de aterosclerosis, lo que comúnmente se conoce como endurecimiento de las arterias. Y esta enfermedad puede causar problemas graves, como ataque cardíaco, accidentes cerebrovasculares e incluso la muerte.
El Servicio editorial de la Universidad del País Vasco/Euskal Herriko Unibertsitatea ha publicado la ‘Guía para el manejo de las dislipemias’, un trabajo en el que han colaborado el doctor José Contreras, del Servicio de Endocrinología y Nutrición del Hospital Quirón Infanta Luisa de Sevilla, y los doctores Alfredo Fernández-Quintela, Leixuri Aguirre y María Puy Portillo, del Grupo de investigación Nutrición y Obesidad del Departamento de Farmacia y Ciencias de los Alimentos de la UPV/EHU, y miembros del CIBER en su área de Fisiopatología de la Obesidad y Nutrición, que es un Centro de Investigación Biomédica en Red dependiente del Instituto de Salud Carlos III.María Puy Portillo explica qué es y cómo tratar la dislipemia.
Alberto Pérez, coeditor de Despertaferro, presenta el libro Fuego griego, flechas envenenadas y escorpiones. La guerra química y biológica en la Antigüedad, un ensayo, que revela que casi todas las armas biológicas y químicas actuales cuentan con un prototipo antiguo: flechas venenosas, agua, comida y aire envenenados, gérmenes y patógenos, estupefacientes y sustancias hipnóticas, armas zoológicas, elementos incendiarios…
Esteban Esteban, presidente de la Asociación para la Enseñanza de la Astronomía, explica que hay empresas que hacen su agosto "vendiendo" estrellas a las que sus nuevos dueños pueden poner nombre. Y sin embargo sí hay una forma de obsequiar a alguien con una estrella, tal y como explica, pero es algo que ni se vende ni se compra.
