Pendientes de la difícil decisión de Juanito Oiarzabal

¿Cuántos billetes más hay para hacer cima? ¿Cómo va a ser el duelo para ganarlos? Y sobre todo, ¿a quién elegirá Juanito para competir contra Iñaki y Andoni por poder hollar la cumbre? Todos estos interrogantes se quedaron sin resolver al finalizar el octavo episodio de "El Conquistador del Aconcagua" y sin embargo fueron muchas las incógnitas que se desvelaron en un capítulo en el que destacaron sobre todo las difíciles decisiones que todos tuvieron que tomar.

Nunca los dos campamentos habían estado tan separados. Juanito se instala en Nido de Cóndores, a 5.400 msnm. con los elegidos: Magda, Roberto, Serafín y Kote, que suben liberados de peso y lo que es mejor, de la tensión por competir, totalmente ajenos a la existencia de los de Mulas Viejo. Allí abajo quedan 5 habitantes que no tienen otra cosa que hacer que especular y especular sobre su incierto futuro. Koro, como primera moradora, ejerce de cocinera ayudada por Laura, que mantiene su alegría y su sentido del humor. Andoni está un poco tocado por la inactividad y comienza a mostrar deseos de irse a casa mientras que Iñaki e Iban, los últimos en llegar, están aún calientes por su eliminación. En especial Iñaki, que se queja de estar eliminado por la decisión arbitraria de Juanito.

Y en estas llega Julian invitándoles a la última asamblea de la aventura. Hay varias cosas que decir pero empieza por requerir el voto de todos para elegir quién de ellos merece subir. Algo esperaban y comienzan a votar. Andoni cree que lo merecen los fuertes y otorga su voto a Iban por afinidad. Iban alaba la trayectoria de Iñaki y le da su voto, pese a ir en su perjuicio. Iñaki duda y al final no le devuelve el voto a Iban y se lo da a Laura. Laura se lo devuelve y en este momento el voto decisivo de Koro sorprende a todos optando por Laura. Al final, ambas se dedican emotivas palabras y se produce un empate entre Iñaki y Laura.

Julian les dice que deberán desempatar entre ellos hablándolo en el campamento. Pero les informa que además habrá otro nominado, que habrá un duelo y que la decisión se tomará en Nido de Cóndores, dónde va a dirigirse para pedir el voto de los cuatro clasificados. Julian se va y Laura muestra su lado más generoso ofreciéndole la plaza de nominado a Iñaki, no sin antes advertirle que no le perdonará si se rinde.

Julian llega a Nido de Cóndores y es recibido por unos participantes indignados por el mal trato que están sufriendo. La voz cantante la lleva, precisamente, Serafín Zubiri, que está arrepentido de haberse embarcado en el proyecto porque no les ha visitado el médico y tienen cazos muy pequeños para derretir el agua. Julian interrumpe la pataleta proponiéndoles una asamblea con una noticia sorprendente y una difícil decisión: hay cinco compañeros que en vez de irse a casa, se han quedado en Mulas Viejo esperando el momento de ser repescados.

Deben pensar esta difícil decisión y apuntar sus votos. Abajo Iban está muy seguro de sus posibilidades, cree contar con los votos de todos salvo el de su "archienemigo" Serafín. Koro se ve fuera de cualquier quiniela y Andoni opta también por Iñaki como el favorito. Y llega el momento de la verdad. Julian conecta por un transmisor con los de abajo y procede a la lectura en directo de los votos. Tensión. Iban se queda con 1 y Andoni con 3. Sorpresa. Nadie lo esperaba. Andoni no termina de asimilarlo.

Juanito le felicita muy contento por el resultado aunque lo lamenta por Iban, que poco a poco asume que no es querido por sus compañeros. Pero aún queda una sorpresa más por desvelar. Julian desata de nuevo la polémica cuando les informa de que hay una tercera plaza para ese duelo y que la decisión la tomará Juanito. Pero no hoy, mañana.

Iban estalla. Le parece un despropósito tener que esperar aún un día más con una tensión que llevan sufriendo durante toda la jornada. Andoni le entiende e Iñaki, aunque tiene una situación más cómoda, intenta tranquilizar a su compañero recordándole que estaba entre los favoritos de Juanito. Eso sí, no pierde la oportunidad de lanzar de nuevo una puya contra el jefe de la expedición y su arbitrariedad a la hora de tomar decisiones. "Es un poco veleta".

Así que el episodio termina con todos esos interrogantes por resolver, con Juanito dudando y muy preocupado por la decisión que tiene que tomar y con una última sorpresa que Julian se reserva desde su tienda antes de decir agur. Nervios, tensión y mucha expectación ante la decisión de Juanito, ante el duelo, ante las plazas para cumbre y, también, ante la sorpresa de Julian.