La columna de José Félix Azurmendi (13/01/2018)

Tx. Desde un punto de vista político, ¿qué cabe esperar de este año que arranca?

JFA. Para empezar, el que hemos estrenado tiene una cosa buena: es un año sin elecciones, lo que debería favorecer la reflexión serena sobre los problemas que venimos arrastrando. Los parlamentos, el de Gasteiz y el de Iruña, y las instituciones en general deberían aprovechar esta pausa electoral para abordar los asuntos que vienen lastrando el discurso político, que sirven muchas veces para no dar prioridad a los problemas de cada día. Estoy pensando especialmente en la lectura correcta y el cierre del conflicto violento particular que hemos vivido los vascos y en sus consecuencias, y a este respecto me ha parecido muy interesante la reflexión que hizo el martes en el encuentro organizado por el Foro Social Rafaela Romero, dirigente socialista guipuzcoana, además de esposa de Jesús Eguiguren.

Ha dicho Rafaela en un encuentro en el que solo faltaba representación del PP, hablando de la política penitenciaria de excepción que se aplica a los presos de ETA, que la mayoría de las víctimas de ETA no quiere venganza, sino que se explique por qué se atentó contra su ser querido. Ojalá fuera verdad lo que dice, aunque a mí no me parezca evidente, pero en cualquier caso quiero entender que lo que está pidiendo ella es que ETA, y seguramente la izquierda abertzale, explique el porqué de su estrategia y sus objetivos, la razón y sinrazón de su proceder en las diferentes etapas de su existencia. A este respecto, además de reconocer que hoy por hoy la respuesta a esa pregunta llevaría a la cárcel a más de uno si fuera sincera, me atrevería a decir que son muchos los ciudadanos vascos los que esperan de ETA y la izquierda abertzale esa explicación.

Tx. Es ese el Foro que ha convocado para esta tarde una manifestación en Bilbao

JFA. La convocatoria de esta tarde la realiza Sare bajo el lema de “Estamos preparados para avanzar juntos”, aunque con el foco puesto en los que se denominan “Niños de la mochila”, un centenar largo de ellos que recorren miles de kilómetros todos los meses para visitar a sus padres presos. Con ese título y tema, ETB-1 ha emitido un reportaje esta semana que ha merecido la felicitación de decenas de miles de televidentes, como nunca antes seguramente, y también la denuncia de COVITE, el PP y las juventudes socialistas, alegando que alentaba la que entienden falsa teoría del conflicto y contribuía a un relato edulcorado del terrorismo de ETA.

También yo tenía dudas sobre la oportunidad de utilizar a niños en campañas políticas y, en este caso, para la visibilización de los daños colaterales de una política penitenciaria de excepción en seres inocentes. Se me despejaron las dudas tras ver el programa y comprobar la delicadeza, además de la profesionalidad, con la que lo trató Xabier Madariaga. Los que hubieran querido que la manifestación de esta tarde no fuera tan multitudinaria como otras anteriores tienen motivos para haber deseado que el conmovedor y movilizador programa en cuestión no se hubiera emitido.

Tx. ¿Algún otro tema de la semana que haya merecido tu atención?

JFA. Le dieron nombre de Tren de Alta Velocidad pero su puesta en marcha consume ya décadas y sigue teniendo un final incierto. Madrid aprobó el primer tramo del que se ofrecía como vía para acceder rápidamente a Europa, entre Madrid y Sevilla. A los vascos se nos prometió una y griega, ausente en la ortografía euskeldun por otra parte, que uniría todas las capitales vascas a gran velocidad también. Como en otras ocasiones, que ETA mostrara su oposición al proyecto provocó que tuviera que materializarse, costara lo que costara y sin debate social. ETA ya solo existe a efectos históricos, pero seguimos sin saber a ciencia cierta lo que costará el tren y para cuándo será, aunque pareciera que por dónde discurrirá está dilucidado ya. El otro día se vivió un capítulo más de este culebrón cuando la consejera vasca del ramo se felicitó en Iruña por los beneficios nacionales vascos que se derivarán del prometido tren, y navarristas y  españolistas se sintieron agredidos, le declararon persona non grata. Si no fuera tan costoso, lo de este tren se prestaría a toda suerte de bromas, además de ser un excelente ejemplo de la insensatez colectiva.

Un apunte final. Ha tenido que morir para que recordáramos o nos enteráramos todos cuánto le debemos a Joxan Artze, un hombre clave en la dignificación de la cultura vasca y la modernización del euskera. Gugan bego!