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Los siete secretos de Jessica Alba

La protagonista de Sin City es ahora mismo una de las mujeres más ricas de los Estados Unidos, según la prestigiosa revista Forbes.

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Jessica Alba sigue tan bella como siempre en la comedia que se estrenó el pasado viernes: El marido de mi hermana. Y para mantener intacto su atractivo, su primer secreto de belleza es no utilizar nunca maquillajes ni cremas convencionales, sino solamente productos ecológicos, es decir, productos elaborados sin agentes tóxicos, ni pesticidas, ni químicos añadidos. En ese campo es toda una experta, porque Jessica tiene su propia empresa de productos ecológicos. Y con esa empresa está ganando más dinero que como actriz.

Su empresa se llama "The Honest Company", y empezó fabricando pañales y toallitas de bebé. Pero ahora fabrican ya 120 productos distintos, con tanto éxito que, en sólo tres años de vida, han pasado de facturar 10 millones de dólares al año, a tener unos ingresos anuales de 250 millones de dólares.

Jessica Maria Alba nació en Pomona (California), tiene solo 34 años, y buena parte de su exótica belleza reside en la mezcla genética que corre por sus venas. La chica siempre ha sabido que su padre es de origen mexicano, y que su madre es de origen francés. Pero el árbol genealógico de Jessica Alba es mucho más variado. Hace poco, Jessica participó en una teleserie documental titulada "Finding your roots": "buscando tus raices", en la que hacen detallados análisis de ADN a sus invitados, para descubrir, con exactitud científica hasta el último detalle de su perfil genética. E de Jessica Alba no podía ser más variado "Tú eres un 33,5% británica, un 5,1 por ciento francoalemana, un 3,9 por ciento escandinava, un 17,3 por ciento ibérica, de la España colonial; y un 1’4 por ciento italiana". Además, el 20% de sus genes son de indios americanos, y la actriz también tiene antepasados subsaharianos, árabes, asiáticos y hasta judíos sefardíes.

Pero, genética al margen, en la familia de Jessica Alba hay, sobre todo, militares. Su abuelo materno fue marine en la 2ª Guerra Mundial. Uno de sus tíos es oficial del ejército de Tierra y estuvo en la Guerra de Irak, y el padre de Jessica era piloto de las fuerzas aéreas. Por eso, la pequeña Jessica pasó toda su infancia en las distintas bases militares a las que fueron destinando a su padre. Y creció en un ambiente castrense, conservador y muy católico. Por eso, de niña, Jessica Alba quería ser monja. Cambió de idea en su adolescencia, cuando el cura de su parroquia le prohibió ir a misa con ropa ajustada, porque según él, la niña, ya casi una mujer, "distraía demasiado a los feligreses".

Pero vayamos con la tercera clave de su belleza: la comida sana. Con sólo 12 años, Jessica empezó a cocinar ella misma su propia comida, porque le sentaban muy mal los fritos y precocinados que solían comer sus padres. La pobre tuvo problemas de salud durante toda su infancia, sufriendo quistes en las amígdalas, una ruptura de apéndice, una media de 4 neumonías al año y gravísimos ataques de asma, que le dejaron los pulmones colapsados 2 veces.  Precisamente para cuidar su salud optó por la dieta sana. Pero es que, además, Jessica descubrió que buena parte de sus enfermedades estaban causadas por los aditivos químicos de ciertos alimentos y productos de limpieza. Por eso decidió fundar una empresa de productos ecológicos.

Con 13 años consiguió su primer papel en una película, gracias a su pelo. Jessica Alba tiene el pelo castaño, de un tono claro muy específico. Era, exactamente, el mismo color de pelo que tenía una de las niñas protagonistas de la comedia "Camp Nowhere". Pero a mitad de rodaje esa niña se puso enferma, y para sustituirla, escogieron a la pequeña Jessica porque, al tener el mismo color de pelo, podían aprovechar los planos generales que ya había rodado la otra niña. Así que Jessica consiguió debutar en el cine no por su talento interpretativo si no por el color de su pelo.

Su pelo, y el resto de su cuerpo, hechizaron a los espectadores en "Inmersión letal". Y con esta película quedó claro que una de las claves del éxito de Jessica Alba es lo bien que le quedan los bikinis. Pero es que, con sus espectaculares medidas de 90-64-94 es imposible que los bikinis le queden mal. Aún así, siempre que puede, usa una doble de cuerpo. Su doble de cuerpo se llama Taryn Dakha, y se parece muchísimo a Jessica Alba.

a Jessica Alba.