El Eibar sigue atragantado (1-1)

El Eibar ha conseguido un punto con sabor muy amargo tras empatar a un gol con el Valencia en Ipurua. Un penalti fallado por Saúl Berjón y el gol den propia puerta de Juncá han condenado a los guipuzcoanos, que han sido mejores que su rival.

El equipo de Mendilibar ha sido muy superior en la primera parte y suyas han sido las mejores ocasiones de gol.

El primer gol ha estado a punto de llegar en el minuto 13, con un remate de Borja Bastón que se ha ido fuera por poco. Segundos después, ha sido Sergi Enrich quien la ha tenido, pero la acertada intervención de Jaume y el poste han evitado el gol. El balón, además, ha tocado en la mano de un defensor valencianista. El árbitro no ha señalado nada.

El equipo de Neville ha dado una imagen bastante pobre, sin crear ocasiones de gol e incapaz de inquietar al Eibar.

Los armeros merecían el gol y este ha llegado al borde del descanso. Sergi Enrich ha rematado un envío de Capa desde la derecha y ha marcado su cuarto gol de la temporada. Resultado justo al descanso.

El equipo de Neville ha salido algo más enchufado en la segunda parte en  busca del empate, pero sin demasiadas ideas.

En el 62, el árbitro ha señalado un inexistente penalti a favor del Eibar y ha expulsado con roja directa a Orban. Saúl Berjón ha fallado la pena máxima y ha desaprovechado una gran ocasión para asegurar la victoria.

Gol en propia puerta de Juncá

El gol del Valencia ha llegado fruto de la mala suerte. Juncá ha intentado despejar un balón en el área pero la pelota se ha colado en la portería de Riesgo.

Ya en el descuento, Ramis ha visto la roja directa, justa, por derribar a un jugador valencianista cuando éste se escapaba en solitario hacia la portería eibarresa.

Al final, emparte con sabor muy amargo en Ipurua.