Cientos de personas protestan en Pamplona contra el cierre de Faurecia

Cientos de personas se han manifestado este sábado a la tarde por las calles de Pamplona para pedir la continuidad de la planta de ICF de Burlada, cuyo cierre ha sido anunciado por el Grupo Faurecia-Lear, y para instar al Gobierno de Navarra a implicarse en la solución del conflicto.

Los manifestantes, algunos de los cuales mostraban sogas anudadas al cuello, han portado una pancarta en la que podía leerse "En defensa de la industria navarra. ICF no se cierra" y carteles con lemas como "200 familias en la calle", "Vuestra codicia es nuestra miseria", "Multinacionales, terrorismo sin corazón" y "Gobierno de Navarra, menos teatro, más soluciones".

Tras la pancarta principal, un grupo de niños, hijos de trabajadores de la fábrica, han marchado portando una pancarta con el lema "Más de 200 familias en lucha".

Los participantes en la manifestación, entre los que había representantes de partidos políticos navarros, han recorrido las calles céntricas de Pamplona hasta llegar a la Plaza del Castillo, donde se ha leído un comunicado en castellano y en euskera en contra del cierre de la planta de Burlada.

Mantener 190 trabajos de la planta

El presidente del comité de empresa de la fábrica, Alfredo Sanz, de CCOO, ha afirmado a los medios de comunicación que el objetivo de esta manifestación y del resto de movilizaciones convocadas por la representación social es solicitar el mantenimiento de los 190 puestos de trabajo de la planta.

Al respecto, ha asegurado que, en este momento, el Gobierno de Navarra es "la única baza que nos queda" y por ello ha instado al Ejecutivo foral a que "se involucre realmente y tome cartas en el asunto", negociando con Volkswagen, uno de los principales clientes de ICF, y se intente "al menos mantener el máximo de puestos de trabajo en la fábrica".

El próximo lunes, ha explicado, por la mañana mantendrán una nueva reunión con los abogados y asesores contratados por la multinacional y por la tarde está prevista una asamblea con los trabajadores.

Sanz ha destacado que no es previsible que haya una nueva reunión con la multinacional como la que tuvo lugar el pasado jueves, que la empresa ya dijo que era "excepcional" y "por deferencia a los trabajadores", al entender que el marco de negociación son las reuniones con el bufete de abogados.

Por ello, ha considerado que no habrá una nueva reunión con la multinacional a no ser que haya "algo brutal" que cambie la situación.

El comité de empresa ya ha recabado en internet y en papel más de 20.000 firmas de apoyo de ciudadanos.