La exposición de la Policía abre sus puertas envuelta en la polémica

El ministro del Interior, Jorge Fernández Díaz ha inaugurado la exposición 'La Victoria de la Libertad: la Policía Nacional contra el terrorismo', que rinde homenaje a los 186 policías españoles asesinados en atentados de ETA, 16 de ellos relacionados con Navarra, y que desde este viernes se exhibe en la Sala de Armas de la Ciudadela.

Al acto también han asistido, entre otros, la portavoz y consejera de Relaciones Ciudadanas e Institucionales, Ana Ollo; la delegada del Gobierno en Navarra, Carmen Alba; el presidente del Tribunal Superior de Justicia de Navarra (TSJN), Joaquín Galve; además de distintos cargos públicos de UPN, Geroa Bai, PSN y PPN.

En su discurso, el ministro del Interior ha elogiado la labor desempeñada por la Policía Nacional en su lucha contra ETA, "una vocación entregada" con la que han contribuido de manera "determinante" a "la victoria de la libertad".

Además, el ministro, en declaraciones a los periodistas, ha hecho alusión a la denegación por parte del Ayuntamiento de Pamplona/Iruñea del permiso para exhibir la exposición en la Sala de Armas de la Ciudadela, una decisión que finalmente fue suspendida por la titular del Juzgado de lo Contencioso-Administrativo número 3 de Pamplona/Iruñea.

Fernández Díaz ha puesto en valor que "finalmente el Estado de Derecho y la Justicia, una vez más, se haya impuesto a la sinrazón" y ha considerado "triste" que "algunos intentaran impedir rendir testimonio de agradecimiento a los 186 policías que cayeron víctimas del terrorismo por defender nuestra seguridad y libertad".

La exposición itinerante 'La Victoria de la Libertad: la Policía Nacional contra el terrorismo' permanecerá abierta desde este viernes hasta el 1 de noviembre.

Víctimas de la Policía denuncian que la exposición es una “burla”

Por su parte, un grupo de afectados por actuaciones policiales han pedido hoy al Defensor del Pueblo, Javier Enériz, que se "posicione" ante la situación que están viviendo "como víctimas", así como la "suspensión" de la exposición sobre la Policía Nacional que se exhibe en la Ciudadela de Pamplona/Iruñea.

En declaraciones a los periodistas ante la sede del Defensor del Pueblo, Ángela Berroeta, hija de Ángel Berroeta, muerto por los disparos de un policía nacional, ha leído un comunicado para mostrar su "disconformidad y enfado" hacia la exposición.

Berroeta ha considerado que la muestra es "una burla" hacia ellos "ya que con esta exposición se está hurgando en nuestro dolor" como personas que "hemos sufrido esa violencia policial". "Pedimos que no se autorice ninguna exposición de esta índole en lugares públicos", ha remarcado.

"Esta violencia no es casual y obedece a una estrategia de Estado diseñada con objetivos políticos y eso es lo que viene a avalar el Ministro de Interior hoy en Pamplona", ha indicado Berroeta.

En esta línea, Berroeta ha manifestado que "quieren convertir" Pamplona/Iruñea "en la ciudad de la apología a la violencia policial" y el mensaje, ha señalado, es que "queremos la verdad, el reconocimiento y la justicia" y  "construir la paz, fuera de exaltaciones de la violencia, una paz asentada en los derechos que nos corresponden".

"No podemos permitir que se haga apología de la violencia policial y menos en un edificio público", ha expresado.

Begoña Castillo, ha denunciado que su hermano, Mikel Castillo, "fue asesinado de un tiro en la espalda por la Policía Nacional". "Un policía que a los quince días de haber asesinado a mi hermano fue condecorado", ha dicho.

Por su parte, Mikel Iribarren, ha explicado que a los 17 años un policía nacional le "pateó en el suelo". "¿Eso no es ser víctima?", se ha preguntado.

También ha estado presente Fermín Rodríguez, hermano de Germán Rodríguez, asesinado por un disparo policial en los sanfermines de 1978. "Es un insulto esta exposición, no tienen derecho a hacer algo así en Pamplona", ha denunciado.

Carlos Ochoa, quien trabaja con temas de memoria histórica, ha afirmado que están intentando "sacar a la luz" el caso de José Luis Cano, "asesinado por la policía durante la ley de amnistía". "Un caso sintomático de lo que afirmamos que no son cuestiones aisladas sino sistemático", ha relatado.

Por su parte, Aingeru Zudaire, ha expresado que recibió un pelotazo disparado por la Policía hace tres años a una distancia de catorce metros y que por ello he perdido la visión del ojo. "Aunque me podían haber matado como pasó con el caso de Íñigo Cabacas", ha denunciado.