Boulevard
Se ha escrito un crímen
"Los cadáveres que flotan en el agua dan mucho margen"
El forense Rafael Alcaraz y el director de Pamplona Negra, Carlos Bassas, hablan en el espacio semanal "Se ha escrito un crímen" de los cadáveres que se quieren ocultar lanzandolos al agua.
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17:27 min
Hablamos en "Se ha escrito un crímen" del caso de Wilson Yanza. Su cadáver apareció la semana pasada en la orilla del Ebro a su paso de Castejón. De las cuatro personas detenidas, tres están en prisión entre ellas su pareja y su sobrino que al parecer lo asfixió tras una pelea doméstica.
En este caso, decía Carlos Bassas "la prueba clave han sido las huellas de arrastre de un cuerpo. Entonces se sospecha que ha sido asesinado en otro lugar, se deduce que se ha llevado el cuerpo en vehículo y comprueban los neumáticos del coche de la pareja que fue lo primero que se llevó la polícia ya que tienen mucha experiencia en este tipo de casos". Añadía que "el caso se ha solucionado porque no estaba planificado" porque subrayaba "si no está muy bien planeado no se puede evitar que se descubra".
Rafael Alcaraz ha explicado qué pruebas pueden extraer los médicos forenses en estos casos de sumersión que asegura "dan mucho margen". Señala que "que un cuerpo flote depende de muchos factores pero sobretodo de la temperatura del agua que retardará la emisión de los gases de putrefacción que son los que hacen que los cuerpos salgan a la superficie". Alcaraz también explica los tipos de sumersiones que existen desde un punto de vista forense, cómo se sabe si una persona ha muerto asesinada o ahogada por ejemplo, por la parada cardíaca que produce al llenarse de agua dulce y "de casos muy planficados que se descubrieron por errores de bulto".