Sociedad -

Documentación

3 de marzo de 1976: Cinco asesinados, pero nadie ha pagado por ello

Aquel día, la Policía entró metralletas en mano en una iglesia de Vitoria-Gasteiz donde miles de trabajadores celebraban una asamblea. 34 años después, nadie ha sido condenado por aquellos sucesos.

Redacción

Whatsapp Facebook Twitter Telegram Email

Han pasado ya 34 años del asesinato de cinco trabajadores en la iglesia San Francisco de Asís del barrio de Zaramaga, en Vitoria-Gasteiz.

En la tercera jornada de huelga que los obreros convocaban para protestar por los ajustes salariales previstos, decenas de miles de ellos se reunieron en este templo y sus inmediaciones para celebrar una asamblea.

La Policía, metralletas y pistolas en mano, desalojó forzosamente la iglesia. Cinco trabajadores murieron y un centenar resultaron heridos de bala. Y después de más de tres décadas, nadie ha pagado por ello.

Pedro María Martínez Ocio, de 27 años, y Francisco Aznar, de 17, murieron allí mismo. Posteriormente, debido a las heridas de bala, fallecieron otros tres trabajadores: Romualdo Barroso, Bienvenido Perea y José García Castillo.

Tan solo habían pasado cuatro meses desde la muerte de Franco. Presidía el Gobierno la misma persona que en la dictadura, Carlos Arias Navarro, y el ministro de lo que entonces se llamaba la Gobernación (Interior hoy día) era Manuel Fraga Iribarne, a quien algunos consideraron "reformista" en cierta época franquista.

Un boletín policial interno de la época, descubierto hace algunos años por el historiador Carlos Carnicero, pone de relieve que la Policía dio mucha importancia al recorrido de la huelga, y temía que se extendiera de Vitoria-Gasteiz al resto de Euskadi y del Estado, terminando con el Gobierno de Arias Navarro. La dureza con la que actuó la policía podría responder a estos temores.

Si te interesó esto, quizá te interesen estos otros temas