Pueblos y Ciudades
Aste Nagusia 2017
Marijaia surca la ría y se despide hasta el año que viene
Agencias | Redacción
La reina de Aste Nagusia ha ardido en la mitad de la ría, poniendo así punto final a nueve días plenos de emociones.
Euskaraz irakurri: Marijaiak itsasadarra zeharkatu eta agur esan du datorren urtera arte
La Aste Nagusia 2017 de Bilbao ha puesto su punto final este domingo con la quema de Marijaia, la reina de las fiestas. A su llegada al Puente del Ayuntamiento ha sido consumida entre las llamas para poder resurgir de nuevo el año que viene, con más fuerza que nunca, si cabe, para anunciar desde la balconada del Arriaga el comienzo de una nueva Aste Nagusia.
A las 21:00 horas, varias traineras, con 28 remeros enfundados en trajes blancos y con el pañuelo de fiestas, han salido desde el Club de Deusto y para partir hasta el pantalán de Pío Baroja. Allí, a las 21:45 horas, los remeros han recibido a la Pregonera, Nati Ovelleiro (miembro de la plataforma Ongi etorri errefuxiatuak), y a la Txupinera, Ane Ortiz (componente de Askapeña Konpartsa), donde, además, han sido homenajeadas con un aurresku.
Un aurresku ha saludado la llegada de la Pregonera y a la Txupinera. Foto: EiTB
A las 22:00 horas, las embarcaciones han salido hacia el Puente de La Merced, donde Marijaia ha dado comienzo a su travesía de despedida por la ría, remolcada por las traineras, atravesando el puente del Arenal hasta llegar al Ayuntamiento. El Ayuntamiento ha repartido barras luminosas para que una ría de luces pudiesen acompañar a Marijaia a su paso por el recinto festivo. Asimismo, las txosnas han apagado las luces para dedicarle una merecida despedida.
A su llegada al Puente del Ayuntamiento, la Pregonera, ha dedicado unas palabras a Marijaia tras las que, sobre las 22:35 horas, se ha procedido a su quema.
La Pregonera ha leído un último mensaje antes de la quema de Marijaia. Foto: EiTB
Marijaia, surcando la ría. Foto: EiTB
Momento en que Marijaia ha comenzado a arder. Foto: EiTB
Momento en que Marijaia ha comenzado a arder. Foto: EiTB