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CURIOSIDADES
Los 7 pecados capitales de Brad Pitt
EITB
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Brad Pitt investiga en la película Seven una serie de asesinatos inspirados en los siete pecados capitales. Por eso, 'La Noche De' les muestra también los siete pecados capitales del actor.
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'La Noche De' cumple 20 años, pero no es el único que está de aniversario. Y es que el mes de septiembre de hace 20 años también se estrenó en los cines Seven, una magnífica película protagonizada, entre otros, por Brad Pitt.
La película trata sobre una serie de asesinatos cometidos por un psicópata que toma como base la relación de los siete pecados capitales: gula, pereza, soberbia, avaricia, envidia, lujuria e ira. Así pues, nosotros os queremos mostrar también los 7 pecados capitales del protagonista de Seven.
El primer pecado de Brad Pitt es el de la lujuria. Lujuria es la que desatan sus brillantes ojos azules, su pelo rubio y su 1’80 metros de estatura. Además, a sus fans les poseyó la lujuria, al ver unas fotos de Brad Pitt completamente desnudo que se las hicieron mientras estaba de vacaciones en la isla caribeña de Saint Barth, en el año1995. Ese año es precisamente cuando se estrenó Seven. El actor tenía entonces 31 años, y la verdad es que, dos décadas más tarde, el bueno de Brad no ha perdido ni pizca de su atractivo.
Su nombre real es William Bradley Pitt, nació en Oklahoma, tiene ahora 51 años. En su más de medio siglo de vida ha seducido a mujeres como Robin Given, Juliette Lewis, Thandie Newton, Claire Forlani o Gwyneth Paltrow, con la que rodó Seven justo cuando eran novios. Posteriormente llegó Jennifer Aniston, con la que estuvo casado 5 años. Pero Brad rompió con ella, dicen que movido por la lujuria, cuando conoció a la sensual Angelina Jolie, rodando Mr. & Mrs. Smith.
Esta pareja de guapos llevan ya 10 años juntos, aunque no se casaron hasta agosto de 2014 en el sur de Francia, en una boda íntima. Los seis hijos de la pareja decoraron el vestido de novia, haciendo dibujos en el velo. Y además, los dos hijos mayores, Maddox, de 13 años, y Pax de 11, acompañaron a la novia hasta el altar. A su paso, Zahara, de 9 años, y Vivianne, de 6, lanzaron pétalos de rosas. Y los pequeños Shiloh, de 8 años, y Knox, de 6, llevaron los anillos.
Pero no todo es alegría en el entorno de Brad Pitt, porque algunos le acusan a el y a Angelina de soberbios. Dicen pecan de soberbia porque normalmente no se relacionan con la gente del pueblo en el que viven. Y es que la pareja y sus hijos pasan la mayor parte del año en el sur de Francia, en una impresionante mansión conocida como Chateau Miraval. Les costó 35 millones de euros, y es allí donde celebraron su boda. Pero los vecinos del castillo se quejan de que Brad y Angelina nunca tratan con los lugareños, y que además, no dan empleo a la gente de la zona. En su mansión del sur de Francia, todo el equipo de seguridad está compuesto por antiguos soldados del ejército británico y de los Navy Seals estadounidenses. Pero Brad y Angelina no han contratado a ningún francés. Eso, a los vecinos del les parece un insulto.
Son muchas las ocasiones en las que se ha hablado de un posible divorcio entre Brad Pitt y Angelina Jolie. Según los rumores, el actor no soporta la presión y control que la actriz ejerce sobre él. Lo cierto es que ambos siguen juntos, por lo que no sabemos si estos rumores son reales o vienen provocados por la envidia de muchos.
Otro de los defectos de Brad Pitt nos lleva a su infancia. Cuando era un bebé ya era rubio. Como todo buen americano, fue con su novia del instituto al baile de fin de curso, practicó varios deportes, se graduó y llegó a la universidad donde estudió Periodismo. Sin embargo, dejó la carrera a medias por pura pereza. Brad Pitt, de la noche a la mañana, decidió ser actor. Así que se plantó en Hollywood y empezó como figurante, rellenando la pantalla en películas hoy olvidadas como la comedia Hunk, o No man's land. Pero con esos pequeños papeles el joven Brad no llegaba a fin de mes y acabó trabajando como descargador del muelle, instalador de neveras o chófer para strippers. Trabajó incluso disfrazado de pollo, como mascota de la cadena de restaurantes 'El pollo loco'.
Y entre tanto pollo asado, podría haber caído en el pecado de la gula, porque lo que de verdad le pierde son la pizza y la cerveza negra, su comida y bebida favoritas. De ahí que tuviera que cuidar mucho su dieta, para estar delgado y fibroso en Thelma y Louise, la película que le lanzó a la fama. Desde entonces, Brad Pitt no ha perdido su apetito por el éxito, porque tiene ya 5 nominaciones al Oscar, y ha ganado 1 Oscar como productor con Doce años de esclavitud Brad Pitt recogió el Oscar con el corte de pelo de la película que rodaba en esos momentos: Corazones de acero. Se trata de una película en cuyo rodaje hubo mucha ira llena. Y es que, por asombroso que parezca, el director de esta película animó a los actores a pelearse entre sí, diciéndoles que, de ese modo, entre ellos "crecería el compañerismo" característico de un pelotón de la Segunda Guerra Mundial. Pero parece que el reparto se tomó las peleas demasiado en serio, porque uno de los figurantes acabó con una herida de bayoneta en el hombro.
Finalmente, dicen que a Brad Pitt le puede la avaricia porque, en algunos rodajes, además de todo el dinero que percibe como salario, ha exigido también que pusieran a su disposición hasta 10 limusinas, 14 guardaespaldas, 3 cocineros y 2 niñeras.
