Internacional -
Crisis nuclear
Alarma en Japón tras dispararse la radiactividad en el mar
La radiación supera 3.355 veces el límite en aguas cercanas a Fukushima. El Gobierno estudia desplegar una tela especial en los reactores y utilizar un buque para almacenar el agua contaminada.
Redacción
El nivel de yodo radiactivo en aguas del mar cercano a la central nuclear de Fukushima supera 3.355 veces el límite de seguridad, según ha informado la Agencia de Seguridad Nuclear de Japón.
Las muestras tomadas ayer martes a 330 metros al sur de una salida de agua próxima a los reactores 1 y 4 revelaron un fuerte incremento del isótopo 131 del yodo respecto al fin de semana.
El isótopo 131 del yodo se degrada a la mitad en ocho días, por lo que el peligro de que afecte a la vida marina en la zona es bajo, según la Agencia de Seguridad Nuclear.
Alternativas para estabilizar la central
El Gobierno de Japón contempla "todas las alternativas" para estabilizar la central nuclear de Fukushima y estudia la adopción de algunas de las medidas que se han filtrado a la prensa.
Entre las medidas mencionadas por los medios, se encuentran el despliegue de una tela especial sobre la planta para evitar la emisión de partículas radiactivas a la atmósfera y la utilización de un buque para almacenar el agua contaminada.
El presidente de TEPCO hospitalizado
Tsunehisa Katsumata, presidente de la empresa que opera la planta nuclear de Fukushima Tokyo Electric Power (TEPCO), ha sido hospitalizado en Tokio a causa de una elevada presión arterial.
Katsumata, de 66 años, apenas ha aparecido públicamente desde que se desató la crisis en Fukushima.
Olas de hasta 30 metros
El balance de víctimas por el terremoto que el pasado 11 de marzo sacudió la costa noreste de Japón ha ascendido a 11.232 muertos y 16.361 desaparecidos.
Un equipo de investigadores de la Universidad Nacional de Yokohama y de la Universidad de Tokio ha comprobado que las olas en la ciudad de Ofunato (Iwate) alcanzaron una altura de hasta 30 metros.
Los expertos han llegado a esta conclusión después de encontrar numerosos peces sobre la superficie del acantilado de Ryori, de 29,6 metros de altura.