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notas de prensa

"Graffiti"

Crímenes de película en la historia del País Vasco

I.A.

eitb.com

El periodista y escritor Santiago Aizarna, publicó un libro sobre los asesinatos más destacados en Euskadi en el año 1987 llamado "Crímenes truculentos en el País Vasco".

El dantzari, folclorista e historiador zaldibitarra Juan Ignacio de Iztueta, le escribió algunos versos a María Concepción de Bengoetxea allá por el 1.800. Da cuenta de la relación que mantenían ambos y que les llevó a la carcel.

De hecho los versos los escribió Iztueta en la prisión de Tolosa y parte de su historia está recogida en el libro Crímenes truculentos en el País Vasco, que recoge las fechorías ocurridas en nuestra tierra desde las tropelía banderizas hasta el doble asesinato de Beizama.

Un libro que el cronista guipuzcoano Santiago Aizarna publicó en 1987 y que desde hace una semanas está de nuevo en las librerías con una segunda edición.

En el libro recoge algunos de los episódios más célebres y que marcaron la niñez de tanta gente. No se refiere a los asesinatos que tienen como sustrato una reivindicación política. Las historias que recoge pertenecen a la memoria popular.

La batallas entre gamboinos y oñacinos sembraron las tierras vascas de cadáveres. Fruto de la lucha por el poder y de grandes traiciones. También es de resaltar, en ese contexto, la quema de Arrasate.

Los salteadores de caminos es una figura que identificamos con los bandoleros de Andalucía por la serie de la TV&' || 'nbsp; "Curro Jiménez". Pero la televisión también tendría materia en la historia del bandolerismo en Euskadi. Salteadores de caminos hubo muchos y muy violentos en el País Vasco.

El doble asesinato de Beizama fue, sin duda, uno de los más conocidos, de los que mayor repercusión tuvo en su momento, gracias a las crónicas de "La Voz de Guipuzcoa".

La historia de lo ocurrido en el caserio Corosagasti la llevó a la literatura el mismisimo Pío Baroja.

Pero si hubo un asesino de los de thriller ese fue José Larreina de Mendaro. Quien dejó relatados los 14 asesinatos que cometió en un poema que canto José Lecuona.

En el prólogo de esta segunda edición, Santiago afirma que hay una cierta idiosincrasia, una cierta manera de proceder.