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MÚSICA
40. aniversario de Euskadiko Orkestra: "La orquesta es como una familia"
"Mi meta siempre ha sido llevar el nombre de Euskadi por el mundo" y con mucho orgullo, dice el trombonista de Euskadiko Orkestra Javier Almarza. Al testimonio de todo un veterano, sumamos el de la joven contrabajista canaria Paloma Torrado, desde hace cuatro años miembro de esta gran familia.
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Paloma Torrado y Javier Almarza, integrantes de Euskadiko Orkestra
23:44 min
El navarro Javier Almarza es trombonista de Euskadiko Orkestra. Tenía 25 años cuando debutó en la, entonces, Orquesta Sinfónica de Euskadi y aún guarda recuerdo del primer ensayo en el Palacio Miramar, el 5 de abril de 1982 con Los preludios de Liszt. "Entonces no había muchas orquestas sinfónicas para trabajar", por lo que "sacar la plaza" y poder trabajar en Donostia, a donde llegó a estudiar con 15 años, fue un verdadero lujo.
Previo a su ingreso en Euskadiko Orkestra, Javier Almarza formó parte de la Orquesta Mondragón; fue en los primeros años de la formación liderada por Javier Gurrutxaga. A solo unos días de cumplir 65 años, con su habitual humor Almarza reconoce que no está mal jubilarse con la Sinfonía nº2 'Resurrección' de Mahler. Su trombón sonará por última vez el 6 de mayo, en el Teatro Principal de Vitoria-Gasteiz.
La canaria Paloma Torrado es contrabajo solista. Cuenta que "tenía claro que quería trabajar en una orquesta, e iba haciendo todas las audiciones que iban apareciendo". Desde hace casi cuatro años forma parte de la familia de Euskadiko Orkestra y, aunque "estaba abierta a vivir donde fuera", confiesa que ahora no se marcharía de aquí. Entre otras cosas, destaca que el público vasco, "tanto el tradicional como el que acude a los conciertos escolares, es bastante agradecido". "Lo bueno que tiene tocar en Euskadi -añade- es que hay una tradición musical que viene desde que son pequeños, y que yo la he visto en otros sitios, tampoco en el extranjero".
