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SECTOR PESQUERO
'Izan arrantzale', un proyecto que busca relevo generacional en el sector pesquero, orientado a niños y niñas
Kofradia Itsas Etxea, la 'casa de los pescadores vascos', puso en 2020 esta iniciativa para generar interés por la pesca en chavales y chavalas de 6 a 12 años. Aprenden desde hacer nudos, aparejos, lanzar la caña, hasta diferenciar y cocinar el pescado.
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Imagen: Lidia Becerra y Anjel Azpillaga
17:44 min
'Izan arrantzale' es una formación que consta de dos partes, 'kaiatik' y 'barkutik', con actividades que se llevan a cabo en tierra y otras desde una embarcación. En origen, su desarrollo constaba de unas pocas horas, pero a día de hoy supone una inmersión de varios días durante el verano, incluso extendiéndose al otoño. Como explica Miren Garmendia, directora de organización de productores de pesca de bajura de Gipuzkoa, "si queremos garantizar el relevo generacional en el sector pesquero vasco, los niños tienen que saber qué es esto de la mar. Tienen que sentir el salitre".
Anjel Azpillaga es uno de los formadores, dentro de este programa que organiza Kofradia Itsas Etxea con la colaboración de Kaixo Musto, Euskal Itsas Museoa y el Aquarium de San Sebastián. Él es educador medioambiental, especializado en el océano y el mundo marino. Destaca la pasión y la curiosidad con la que los más pequeños de la casa participan en este aprendizaje. "todos los años repiten niños y niñas. Eso es buena señal. Intentamos hacer cosas nuevas. Es un programa espectacular", añade.
La parte de 'izan arrantzale' que tiene lugar en el mar la capitanea Iñaki Alberdi, a bordo del barco 'Beti Oribay'. Resume esta experiencia formativa con una frase: "Yo he intentado que este barco sea un aula del mar. Estoy más emocionado que ellos", en relación a quienes participan en la misma. El objetivo es "que les pique el gusanillo de la mar" y que vivan "una pequeña aventura todos los días". En definitiva, concluye, "queremos transmitir un medio de vida".
Una de las niñas que ha participado en este pionero proyecto es Lidia Becerra, que afirma que aprende mucho con todo lo que les enseñan, "a diferenciar los peces que vamos a pescar a la isla Santa Clara", por ejemplo. Igualmente, pone en valor otros aprendizajes como saber lanzar la caña, elegir bien el anzuelo adecuado, "es muy divertido", apostilla. Además, recalca que "nos enseñan a cocinar diferentes cosas con pescado, como un guacamole con pescado. Luego lo podemos llevar a casa y que lo disfruten nuestros padres".
