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Azkarraga: 'El gobierno socialista tiene bastante miedo a realizar cambios'

El portavoz de Sare, Joseba Azkarraga, califica los movimientos de Instituciones Penitenciarias de 'venganza constante'. Cree que el Gobierno puede tener voluntad de hacer cambios pero 'tiene miedo'.

  • 12:03 min
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Entrevistado en ‘Ganbara’ de Radio Euskadi y Radio Vitoria, el portavoz de la red ciudadana Sare, Joseba Azkarraga, considera que los traslados de los reclusos de Kepa Arronategui, de Almería a Zuera (Zaragoza), y de Maite Igarriz desde Castellón a Logroño "tiene muy poco que ver con las expectativas que se crearon cuando el presidente del Gobierno anuncio a bombo y platillo que iba a haber un cambio en profundidad de la política penitenciaria. La rehabilitación constante que venimos haciendo desde hace mucho tiempo es poner fin a una política de alejamiento y de dispersión que dura ya 30 años y que supone un sacrificio muy importante no tanto para el preso-presa sino para el colectivo familiar".

Según Azkarraga los presos y sus familiares se encuentran "ante una venganza constante de Instituciones Penitenciarias en la etapa del Partido Popular, pero con el partido socialista estamos viendo que no está habiendo ningún cambio. Al final el propio gobierno socialista puede tener voluntad de hacer estos cambios  pero el problema está en que tiene bastante miedo a realizar estos cambios".

Ha añadido que "el preso no tiene que asumir nuevas exigencias que ninguna normativa, ningún reglamento, ninguna ley le está exigiendo. El fin de esa política de alejamiento no exige contrapartidas a los presos y presas. A quien exige fundamentalmente el cumplimiento de la ley es al Gobierno".

Sobre la reunión mantenida en Lehendakaritza con el secretario de Paz y Convivencia del Gobierno Vasco, Jonan Fernández, asegura que "hay actitudes y estrategias que nosotros no compartimos. Pero eso no quiere decir que nosotros entendamos que el Gobierno vasco está en una posición contraria a los objetivos que nosotros perseguimos. Ya sabemos quiénes son los enemigos de este proceso y no es el Gobierno Vasco".