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CARA A CARA 16-1-2019

"El TAV aparte de una sangría económica está siendo una sangría humana"

Igor Goikolea y Alain Coloma responden a la pregunta que les hace el periodista y moderador, Ismael Diaz de Mendibil, acerca del TAV -Tren de Alta Velocidad-.

  • 8:22 min
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Diaz de Mendibil les dice que visto lo visto y vivido lo vivido, la historia del soterramiento es larga y les pregunta si creen que el TAV va a llegar alguna vez a tierras alavesas, a tierras vascas. Igor Goikolea piensa que llegar va a llegar, algún día... y le surgen dudas ya que recuerda que el Gobierno Central lo anunció por primera vez el año 88. El moderador alude a décadas de información, diferentes ministros, tasaciones diversas, distintas ubicaciones. Alain Coloma opina que llegará pero advierte que lo seguro que llega hoy a Vitoria es el ministro de Fomento. El colaborador recuerda que es un ministro que ha presentado hace unos días unas inversiones de 450 millones para Euskadi. Convencido de que el TAV tiene que llegar, Coloma asegura que con él son 30 años de calma y plantea como soluciones ahora que haya dinero, voluntad y acuerdo.

Goikolea explica que se vuelve a anunciar que no hay fecha de finalización y que el tramo guipuzcoano va a superar mínimo los 247 millones de presupuesto inicial, lo que le parece una auténtica barbaridad. El periodista insiste en preguntar a los colaboradores si creen que el TAV va a llegar a tierras vascas, y lo va a hacer soterrado. Alain Coloma espera que sea soterrado pero para él lo más importante es que llegue. Esta llegada supone, en su opinión, mejorar la conectividad con Europa y con la capital de España.

El comentarista, Igor Goikolea, señala que hay unas alternativas, que habría que preguntar a la gente de La LLanada, de la zona de Agurain... Él explica que se ha hablado de cifras, años, millones y opina que el TAV aparte de una sangría económica está siendo una sangría humana. Su pregunta es si saben cuantos trabajadores han muerto en las obras y responde que diez personas, lo que le hace exclamar que trabajar ahí es un peligro muy serio. Alain Coloma sostiene que sobre el drama humano no tiene nada que añadir. El periodista concluye comentando que los dos contertulios están convencidos de que el tren llegará pero no saben cuando.