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ESCRITO EN EL AIRE

'La objeción de conciencia necesita reflexión y un cambio legislativo'

Enrike Ruiz de Gordoa habla sobre el derecho a la objeción de conciencia a raíz del caso de un bombero que se negó a transportar un cargamento de armas que iban a Yemen y que ahora ha sido amonestado.

  • 3:48 min
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Los datos rebelan que las personas empleadas en el sector público que mejor están valoradas por la ciudadanía son los y las bomberos, aunque estas son muy pocas y por ello ha habido una reciente campaña institucional de nuestra Diputación Foral de Araba/Álava para que las mujeres dejen, poco a poco, de ser la gran anécdota en un espacio que hasta hace bien poco y en la práctica, estaba vetado a una presencia femenina.

Al margen de caer en el manido imaginario de que la mayoría de los chicos, principalmente, hemos jugado y soñado en nuestra infancia a emular a los bomberos, de que fueran y puedan seguir siendo nuestros héroes o de que sus calendarios puedan ser de los más deseados para cambiar de año, hay noticias que, vinculadas a otras labores más desconocidas que realizan estos profesionales, pasan desapercibidas. Pero ha habido una que deseo compartir y reflexionar.

El 13 de marzo, un cabo al frente de un pequeño retén de bomberos de la Diputación Foral de Bizkaia, se dirigió al Puerto de Bilbao para la prevención de materias peligrosas que se transportan y cargan allí, misión para la que suelen ser requeridos por la Autoridad Portuaria. Al enterarse del tipo de carga, este profesional alegó objeción de conciencia para no cumplir su tarea encomendada por entender que ese cargamento de explosivos se iba a utilizar contra civiles en el conflicto de Arabia Saudí contra Yemen. Por ello, avisó a sus superiores y pidió ser relevado de este retén, lo que retrasó, minimamente, dicha labor. A este cabo de bomberos se le ha abierto un expediente y se enfrenta a una sanción de pérdida de empleo  y sueldo de entre dos y cuatro años.

Son casi ciento setenta mil las firmas recogidas, hasta ahora, en la plataforma virtual  Change.org para pedir que se archive sin efectos el expediente a este profesional. Firmas  como muestra de solidaridad con este bombero que se negó a participar en la supervisión de los trabajos de carga de 26 contenedores  con armas y explosivos, algo así como 31 toneladas de auténtico material bélico que termina, como siempre, con la vida de personas inocentes.

La objeción de conciencia hoy también puede y debe tomar otros derroteros y son necesarios la reflexión y el cambio legislativo ante hechos como el que estamos comentando. Los Servicios de Bomberos están para prevenir, para evitar mayores problemas, para salvar y asistir a las personas, incluso para potenciar la implicación voluntaria, como personas y colectivo, en accidentes y catástrofes, que, por desgracia, se multiplican y que se nos muestran en los medios de comunicación social, y ante los que, las personas de bien, mostramos nuestra repulsa y hartazgo.

Por todo ello, nuestra solidaridad con Ignacio Robles, ese bombero que se negó a dirigir un retén de seguridad en aquel cargamento de bombas, desde Euskadi, con destino a Arabia Saudí. Solidaridad con todas las personas que por conciencia toman o puedan tomar decisiones que conciencien, ejemplaricen o puedan evitar cualquier violación de los derechos humanos, sea aquí o en Yemen.

Gernika fue bombardea. Hoy son otros pueblos y ciudades los nuevos Gernikas. Y por todos ellos, también podemos hacer algo. Por conciencia.