Cerrar

Radio Vitoria Gaur Actualidad

RV GAUR ACTUALIDAD

Gizarterako atiende cada año a 150 mujeres que ejercen la prostitución

RV GAUR

En Radio Vitoria Gaur hemos hablado con la asociación Gizarterako sobre su trabajo en defensa de los derechos de las mujeres que ejercen la prostitución en Álava

  • 29:22 min
imagen player
imagen player
imagen player

Gizarterako, nacida en 1986, es una asociación sin ánimo de lucro que centra su acción en ayudar y acoger a las mujeres que ejercen o han ejercido la prostitución en Álava. El objetivo: la integración social de estas mujeres que sufren una discriminación múltiple.

Según explica Hito Rosado, presidente de Gizarterako, la prostitución ha cambiado mucho en los últimos años. En la década de los 80 y 90 la mayor parte de las mujeres que ejercían la prostitución eran nacionales. Con dos marcados perfiles: por un lado, aquellas que llegaban desde los pueblos a la ciudad buscando una vida mejor pero que lo lograban encontrar trabajo, y por otro, aquellas que consumían drogas de forma dependiente.

Hoy en día en cambio el perfil es bien distinto. En su mayoría son mujeres inmigrantes: africanas, latinoamericanas o procedentes del este de Europa.

Mujeres que se encuentran de forma irregular en el país y que temen acudir a las instituciones por miedo a la deportación. Por ello, desconocen cuáles son sus derechos, ni como acceder a ellos.

Con esta realidad, Gizarterako atiende cada año alrededor de 600 demandas concretas y ayuda a cerca de 150 mujeres.

Una de las herramientas más efectivas a la hora de acercarse a estas mujeres es el equipo de campo de la asociación. Un grupo de voluntarios y voluntarias que recorre las calles y rotondas donde de forma más habitual se ejerce la prostitución y visitan todos los clubs de alterne del territorio. Así, dependiendo de la noche, en las rotondas pueden encontrarse de 6 a 25 mujeres, y cerca de 40 en los clubes.

Como explica Sandra Camarena, trabajadora social de Gizarterako, la prostitución en Álava tiene rostro de mujer inmigrante. Mujeres que con la promesa de una vida mejor parten engañadas por las mafias de sus países de origen. En algunos casos pasan años hasta que consiguen llegar a Araba y cuando llegan aquí se encuentran con la peor de sus pesadillas: una gran deuda contraída con las mafias que las retiene durante años bajo amenaza.

En la otra cara de la prostitución están los clientes. Desde Gizarterako explican que el último estudio sobre los consumidores es viejo y data de 2010. Aún así no atiende a un perfil concreto, son hombre de todas las edades y de todas las escalas sociales. Pero advierten, han apreciado un descenso en la edad de los clientes.

Desde Gizarterako señalan que por desgracia el éxito en la integración de estas mujeres es mínimo. Son pocos los casos en lo que logran sacar a estas mujeres del entorno de la prostitución. Y sí la regulación traerá o no una mejora en la calidad de vida de estas mujeres es un debate que sigue abierto en la asociación.